No cabe duda que en ocasiones suceden hechos que uno no se puede explicar, como el que ocurrió la mañana de este martes en Argentina, pues un boxeador asesinó a su esposa mientras estaba dormida, por lo que luego de esto, corrió a contarle a un familiar lo que había hecho sin contemplar que este lo podría acusar con la policía, por lo que bastó una llamada de él para que fuera detenido. Una historia lamentable.
Según el reporte del diario ‘Marca’, medios locales en Argentina informaron esta mañana que el boxeador Enzo Gauna fue el autor de tan brutal crimen, pues aprovechó que su esposa estaba dormida para plantarle un total de 20 puñaladas en todo el cuerpo, por lo que la mujer no tuvo forma de defenderse y murió de inmediato, así que al pugilista no le quedó más que huir. No se sabe por qué lo hizo al momento.
La mujer fue identificada como Valeria Coggiola de 30 años, quien tenía tres hijos de 3, 12 y 13 años. Afortunadamente ellos dormían en otra habitación al momento del ataque por lo que no sufrieron daños pero obviamente vieron momentos después el cuerpo de su madre.
Este siniestro sucedió en el barrio ‘El Molino de General de Pico’, Argentina, por lo que Enzo Gauna salió corriendo y se dirigió a Catriló, localidad donde vive uno de sus familiares, pues entró en crisis y quería desahogarse con alguien. El error más grande fue que su ropa estaba toda ensangrentada, por lo que alertó a algunas personas aunque estas no fueron quienes dieron parte a las autoridades.
En casa de su familiar, Enzo Gauna le contó lo que acababa de hacer y obviamente esperaba comprensión pero fue todo lo contrario, pues de inmediato llamó a la policía para que fueran al domicilio y detuvieran al boxeador, pues al estar con la ropa llena de sangre y una expresión bastante alterada, tuvo temor de que su vida corriera peligro.
La policía fue al lugar de los hechos donde encontraron a Valeria muerta, a sus hijos asustados en una habitación y el arma con la que asesinó Enzo a su esposa, pues la cuchilla llena de sangre estaba muy cerca del cuerpo.
El boxeador ya está en prisión y se mantendrá ahí hasta el día de su juicio, pues a falta de determinar el día y la hora donde le dictarán sentencia a este hombre, habrá que esperar la determinación de las autoridades.