Cuando uno pensó que lo había visto todo, llega el Borussia Dortmund a decirte “quítate que ahí te voy”. Necesitaban ganar, solamente eso, para ser campeones de la Bundesliga.
Básicamente, al Borussia Dortmund se le juntaron todas las combinaciones positivas para ser campeón: Último partido en casa, contra rival que no se jugaba nada y estrenando camiseta con homenaje al estadio.
Nada podía salir mal… hasta que se les olvidó que los partidos había que jugarlos y no por obra y gracia del señor, serían campeones. Posiblemente el facepalm más grande en la historia de la Bundesliga.
La crónica de terror de cómo el Borussia Dortmund dejó escapar el título de la Bundesliga
Primero, tenemos que decir que todos los partidos se jugaron a la misma hora y el Bayern Munich todavía peleaba por el título, pero no importaba tanto su resultado para el Borussia Dortmund, los de amarillo y negro tenían que ganar.
Al minuto 8, el Bayern hizo su chamba y Kingsley Coman abrió el marcador ante el Colonia, mientras en el Signal Iduna Park se jugaba el Borussia Dortmund vs Mainz.
Pero, poco les importaba el gol de Coman, porque incluso con la victoria del Bayern, el Dortmund necesitaba ganar su partido, pero nunca imaginaron la cruzazuleada que les esperaba.
Siete minutos después del gol del Bayern, llegó Andreas Hanche-Olsen para hacer que en el Signal Iduna Park, se viviera un silencio sepulcral, porque hizo el gol para el Mainz.
Del susto, al respiro y a la frustración
Sí se silenció el estadio, pero tanto afición como jugadores sabían que se podía remontar. Cinco minutos después de gol del noruego, llegó la fortuna al Borussia Dortmund, porque recibieron un penal.
Sebastien Haller fue el encargado de cobrarlo, se notaba con confianza, pero, el portero adivinó un pésimo cobro del costamarfileño y el estadio pasó de la confianza a la preocupación.
Y para acabarla de amolar, cinco minutos después del penal fallado, el Mainz volvió a encontrar el gol que alejaba demasiado al Borussia Dortmund del título de Bundesliga.
La remontada que no fue
El Borussia Dortmund se fue al descanso con el marcador de dos goles en contra, por lo que en la segunda parte, tendrían que salir con todo para revertir el marcador… y así fue.
Lamentablemente, entre que Haller no anduvo fino, que el portero se aventó un juegazo y que los locales se quedaban sin ideas en ofensiva, se gestó la cruzazuleada.
A 20 minutos del final del partido, Raphael Guerreiro volvió a llenar de esperanza al estadio, porque se aventó un buen remate para acortar distancias, todos en aquel momento soñaban.
La suerte parecía sonreírle al Borussia Dortmund, porque Ljubacic anotó un penal ante el Bayern Munich que hacía al Borussia Dortmund campeón, peeeeeeeeeeeero como dijo Emmanuel: “Todo se derrumbó”.
Porque Jamal Musiala, que llevaba cuatro minutos en el campo, anotó el gol de la victoria para el Bayern Munich y dejaba sin campeonato al Borussia Dortmund.