En la práctica, Guillermo Álvarez Cuevas ya no fungía cargo alguno en la Cooperativa Cruz Azul ni en el equipo de futbol tras la orden de aprehensión que hay en su contra por lavado de dinero y delincuencia organizada, pero a partir de este día Billy está fuera legalmente, por lo que la era de los Álvarez ha terminado oficialmente y hay documentos para probarlo.
El último clavo en el ataúd se puso en la Séptima Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, que validó la asamblea de socios celebrada el pasado 29 de septiembre de 2018, en la cual se nombró a José Antonio Marín Gutiérrez y Víctor Manuel Velázquez como titulares de los Consejos de Administración y Vigilancia.
¿Qué significa esto?
En su momento, Álvarez había apelado y descalificado aquella asamblea de socios y se mantuvo al frente de la cooperativa y del equipo de futbol, que para ese entonces disputaba el torneo Apertura 2018, para el cual recién se había mudado al Estadio Azteca y era dirigido por Pedro Caixinha.
Sin embargo, al ser validad la asamblea se reconoce a José Antonio Marín y Víctor Manuel Velázquez como los dirigentes del equipo de futbol y de hecho ya habían entrado en funciones hace más de un mes. Tanto Marín como Velázquez, ahora puede tomar decisiones tanto en la cooperativa como en el club de futbol.
Hoy legalmente los consejos que mandan en @lacruzazul están a cargo de José Antonio Marín y Victor Velázquez , según la sentencia definitiva en un Tribunal. @WRADIOMexico , @deportesWRADIO pic.twitter.com/2Sy0dwgAbF
— ó (@cordova_sports) October 21, 2020
Adiós a la era Álvarez
Por consecuencia, Álvarez deja de ser reconocido como presidente de la cooperativa y del equipo de futbol, de hecho el propio exdirectivo había presentado su renuncia en el mes de agosto.
Este es un golpe fuerte en la historia del equipo de futbol, que nació gracias a los Álvarez, en concreto gracias al fallecido Guillermo Álvarez Macías, padre de Billy, quien heredó al equipo y a la presidencia de la cooperativa tras la muerte de Macías en diciembre de 1976.
Actualmente, Álvarez Cuevas se encuentra prófugo de la justicia junto a su cuñado Víctor Garcés, y otras personas implicadas en el caso de delincuencia organizada, y en cuento sea capturado será trasladado al penal de Almoloya, mientras que su hermano Alfredo evitaría la prisión tras ayudar a las autoridades durante el proceso de investigación, pero también se encuentra fuera de la cooperativa y del equipo de futbol.
