El Barcelona volvió a hacer historia en la Champions League Femenil. La victoria de 4-1 ante el Wolfsburgo representó el regreso del equipo al Camp Nou, que se llenó y contó con 91 mil 648 aficionados, ¡nuevo récord!
Hace apenas unas semanas, el Barça recibió al Real Madrid e instauró récord de asistencia en la historia del futbol femenil. Las semifinales representaron una nueva oportunidad de meterse a los libros de historia y el ambiente es indescriptible, a pesar de la distancia.
El Camp Nou fue una fiesta con otro lleno
Miles de aficionados se dieron cita en los alrededores del Camp Nou para recibir a las jugadoras del Barcelona. Banderas, cánticos que unieron a la gente en una sola voz y la ilusión de seguir en la pelea por la Champions League, crearon magia en el ambiente.
Lo mejor es que esta unión demostró que el futbol femenil no conoce de género, ni edad. Niños, niñas y adultos de todas las edades llenaron las tribunas. Y prueba de que están muy cerca del Barcelona Femenil, es que las playeras con nombres como Alexia, Aitana y Hermoso son una constante.
Los goles que tienen al Barcelona con pie y medio en la final de Champions
Aitana Bonmatí abrió el marcador apenas al minuto 2. La canterana del Barcelona robó el balón y se dio el lujo de definir entre las piernas de la portera Almuth Schult. La anotación hizo crecer el ambientazo en el Camp Nou y también el juego de las locales.
Prueba de ello fueron las llegadas a la portería rival y que el marcador ya estaba 3-0 al minuto 32. Caroline Graham Hansen incrementó la ventaja al minuto 10 con una jugada individual digna de enmarcar y más adelante, Jenni Hermoso firmó el tercer tanto de la noche.
La futbolista originaria de Madrid consumó una jugada colectiva en medio del desconcierto de la zaga de las ‘Lobas’. Mientras tanto, los cánticos continuaron dándole al juego un toque emotivo.
Alexia Putellas no se quiso quedar atrás en los festejos. La reina del futbol femenil se hizo presente en el marcador gracias a un pase monumental de Patri Guijarro; esto, sumado a los huecos de las defensas, terminó nuevamente en el fondo de la red para el Barcelona.
El complemento llegó con más anotaciones, aunque para el Wolfsburg. La escuadra alemana logró descontar a través de Jill Roord, quien no pudo ni festejar a gusto. En un principio parecía que la árbitra señaló fuera de lugar, pero al final el gol contó y revivió la esperanza.
Y para poner broche de oro al partido y a la noche de ensueño del Barcelona, Alexia Putellas marcó su doblete desde el punto penal.