Se jugó el cuarto partido de la Serie Mundial y se rompió una racha impresionante. Los Angeles Dodgers le propinaron una derrota a los Houston Astros 6-2. Sin embargo, no solo fue el descalabro, además quebró el récord perfecto que tenían los locales en su estadio.
Durante todos los playoffs los Astros no habían perdido un solo partido en el Minute Maid Park. Es más, fue la primera vez que Houston se vio en desventaja en la pizarra en toda esta postemporada.
This series is TIED. @Dodgers hand Houston their first home loss, get HUGE Game 4 victory. #WorldSeries pic.twitter.com/QracnADLKD
— MLB (@MLB) 29 de octubre de 2017
Todo comenzó con el bullpen de los texanos. Su abridor, Charlie Morton aguantó muy bien los embates de los bateadores angelinos, pero después los lanzadores que lo relevaron fallaron.
Después de la chamba de Morton entraron las entradas de la victoria para los Dodgers. En la novena un Cody Bellinger puso la rayita de la ventaja y después, con dos compañeros en base Joc Pederson sentenció las cosas con un cuadrangular.
Mientras, Tony Watson hizo muy bien su trabajo manejando el poder de José Altuve y compañía. Además, Kenley Jensen cerró decentemente el juego y la victoria, aunque eso sí, Alex Bregman le conectó un home run solitario en la novena que puso la segunda carrera aunque fue insuficiente.
Gracias a este vuela bardas esta Serie Mundial rompió el récord de más batazos de este tipo. En 2002 fueron 14 y ahora van 15 y los que faltan.
Así, la serie entre Dodgers y Astros está empatada a dos victorias por bando. El domingo 29 de octubre seguirá la acción en Houston y de ahí regresamos a LA.