Esta no ha sido la mejor temporada del PSG en los últimos años pero aún así los parisinos se han mantenido en los primeros planos. El conjunto de la capital francesa necesitaba algo para olvidarse de la eliminación en Champions frente al FC Barcelona y la Copa de Francia podía ser ese bálsamo que aminorara el dolor del Paris Saint-Germain, pero en frente tenían al joven y poderoso AS Mónaco.
El choque de titanes comenzó como se esperaba. Ambos equipos salieron con una postura ofensiva a sabiendas de que su principal virtud es precisamente su ataque y fueron los parisinos quienes abrieron el marcador. Marco Verratti robó el balón en media cancha y se combinó con Julian Draxler y Ángel Di María en una extraña triangulación. Draxler puso el primero ya con el portero del Mónaco vencido.
Los del principado respondieron y empataron el encuentro al minuto 27. Djibiril Sidibe realizó un desborde por la banda derecha y al entrar al área retrasó el esférico para la aparición de Thomas Lemar. Lemar controló el esférico y luego metió un tremendo zurdazo que dejó sin posibilidades a Kevin Trapp. A raíz de ese gol el AS Mónaco se fue encima pero no pude concretar.
El PSG sigue siendo un equipo fuerte (menos cuando juega contra el FC Barcelona) y no hay que dejarlos vivir porque sino te harán pagar. Justo antes del descanso Di María aventajó a los parisinos. Edinson Cavani inició un contragolpe y tocó para Serge Aurier, el marfileño envió un pase cruzado para Julian Draxler y el alemán controló con dificultades. Aún así Draxler logró pasar la bola a Di María y el argentino definió de zurda sorprendiendo al guardameta pues el balón le había quedado para el perfil derecho.
El AS Mónaco tenía que salir con todo en l segunda mitad para lograr el empate ; sin embargo pasó todo lo contrario. Los del principado perdieron el balón en la salida y el PSG se los cobró caro. Marco Verratti envió un centro de tres dedos para Cavani y el uruguayo definió de volea pegado al poste derecho de Daniel Subasic. El mismo Matador puso la puntilla y el PSG se quedó con la Copa de Francia.