Una vez más el Arsenal definió todo en la ida de los Octavos de Final de la Champions League. Sí, los muchachos de Arsene Wenger quedaron prácticamente fuera por séptimo año consecutivo en esta instancia y es que de plano parece que no saben jugar a la hora buena.
Todo inició en el 2011 cuando el Barcelona los dejó fuera. Ahí no se puede reclamar tanto el resultado del primer juego porque lo ganaron. Sin embargo, la derrota 3-1 en la vuelta los dejó afuera y comenzaría la mala racha.
Para la siguiente temporada se enfrentarían al AC Milan, mismo que les metería cuatro en la ida con doblete de Robinho. Los Gunners lo intentaron en el siguiente juego, pero el 3-0 que anotaron se quedó corto.
En 2013 la historia se repitió. El Bayern Múnich los venció en el primer juego de Octavos 3-1 y llegó con gran ventaja a la vuelta. El Arsenal ganó 2-0 el siguiente duelo, pero el gol de visitante llevó a la siguiente fase a los teutones que serían los campeones.
Para la campaña 2013-14 ya no se sabía si era consistencia o de plano algo similar a Cruz Azul. Otra vez Wenger y sus muchachos se encontraban en 8vos de Final y otra vez se enfrentaron al Bayern. El resultado: otra eliminación.
2015 podía ser el año (al menos para los que aún tenían la ilusión). El Mónaco no pintaba para ser un rival tan fuerte, pero terminó metiéndole tres goles en la vuelta y definió la eliminatoria.
Llegó la Fase de Eliminación directa en 2016 y el rival era el Barcelona (sí, también no hay ayuda con los contrincantes). Los culés anotaron un 2-0 en la ida, para la vuelta iban muy cómodos y metieron otros tres pepinos.
Ahora, cuando se supo que una vez más se enfrentaría al Múnich la esperanza casi murió y con toda razón. Este partido no se veía tan disparejo, pero en 10 minutos del segundo tiempo se puso 5-1 y el Arsenal ya se despidió de la Champions.
Por esto y más cosas es que el puesto de Arsene está en duda. Entre mala suerte en los sorteos y no saber jugar la ida de las llaves, la maldición de los Gunners parece eterna.
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