Es un poco irónico que tu peor temporada en 20 años te abra las puertas para ganar la Premier League, pero ese es el caso del Arsenal. Y es que los Gunners fueron un auténtico fiasco la campaña anterior, pero por ilógico que suene el fracaso de las 2016-2017 podría ser la clave para que el equipo se lleve el título de liga este año.
La temporada anterior la incertidumbre se apoderó del conjunto londinense debido a las situaciones contractuales de Alexis Sánchez y Arsene Wenger. Lo del chileno aún no se resuelve pero al menos ya se sabe que el francés seguirá un año más con los Gunners.
Sin embargo la continuidad del estratega no convenció a muchos, pues a lo largo de la campaña anterior se vieron muchas protestas afuera del Emirates Stadium exigiendo la salida del francés. Los manifestantes portaban pancartas con la leyenda “Wenger Out” y hasta un avión mostró un letrero en contra del entrenador.
La presión sobre Arsene Wegner este año es inmensa (sólo comparable a la que tiene Pep Guardiola), pues el año pasado todo fue un fracaso. El Arsenal no ganó la Premier… otra vez, pero ahora ni si quiera terminó cuarto; los Gunners cayeron hasta la quinta posición y quedaron fuera de la Champions League por primera vez en 20 años… al menos el equipo ganó la FA Cup.
Lo divertido del asunto es que el haber quedado fuera de la UCL le abre las puertas al Arsenal para ganar la Premier. No participar en la Champions es una gran ventaja que tendrán los Gunners sobre sus rivales en la lucha por el título, pues no tendrán un calendario tan pesado y tampoco se verán a obligados a rotar constantemente a sus titulares o a sobrecargarlos.
Es verdad que el equipo participará en la Europa League, pero para nada es lo mismo jugar a media semana contra el Maccabi Tel Aviv que contra el Barcelona o al Real Madrid. El Arsenal enfrentará en Europa oponentes a los que en un buen día podría derrotar con su segunda o hasta tercera escuadra; en cambio Manchester United, Manchester City, Chelsea, Tottenham y Liverpool sí deberán emplearse a fondo desde el principio de su competición europea.
Es decir que de los seis favoritos para ganar la Premier (según las apuestas), cinco estarán en Champions por lo que si les va bien en la UCL tendrán un calendario saturado. En cambio el Arsenal estará mucho más relajado pues será quizá hasta los Cuartos de Final de la Europa League cuando se tope un rival más o menos de su nivel.
Por otro lado y pese a los fuertes rumores sobre las salidas de Alexis Sánchez y Mesüt Ozil la realidad es que a falta de dos semanas para que se cierre el mercado los dos jugadores siguen siendo parte del equipo. Además, los Gunners reforzaron su ofensiva con Alexandre Lacazette, su defensiva con Sead Kolasinac; Granit Xhaka parece que este año sí va a justificar su fichaje, Mohamed Eleny cada día juega mejor y el equipo mostró buenas cosas en el Community Shield la semana pasada.
La verdad es que ahora sí el Arsenal y Wenger no tienen pretextos. Este es el mejor escenario que se les podía presentar para ganar la Premier, cinco de sus rivales directos en la lucha por el título tendrán un calendario más complicado y cuatro están en circunstancias desfavorables: el United apenas va saliendo de su crisis, el City está ultra presionado, el Chelsea regresa a Europa y el Liverpool vive un drama con la novela de Coutinho.
Los londinenses debutan mañana cuando enfrenten al Leicester City, octavo favorito para ganar la liga y equipo que se ha especulado vendería Riyad Maherez al Arsenal si se va a Alexis. Así que ya saben fans de los Gunners, este año sí pueden ilusionarse… pero sólo un poquito.
