A partir de la eliminación de la Selección de Argentina en el Mundial de Rusia tras caer 4-3 contra Francia, se vendrán cientos de críticas. Una gran parte apuntará hacia los dirigentes, que tienen un lío desde hace varios años, no sólo en la Selección, sino también en la liga argentina.
Más allá de los nombres, que apuntarán mucho al presidente de la AFA, Claudio Tapia, y aspectos extra cancha, hay cinco pecados que apuntan más hacia lo futbolístico y que en conjunto tienen a Argentina fuera de la Copa del Mundo.
1.- Defensa de chocolate
Durante sus cuatro partidos en el Mundial de Rusia, nunca pudo dejar su puerta en cero. La albiceleste se fue con una marca de nueve goles en contra, dos más que la frágil Arabia Saudita y sólo dos menos que Panamá, que oficialmente es el peor equipo de esta Copa del Mundo.
2.- No hay un delantero matón
Tal vez desde los tiempos de Gabriel Batistuta, Argentina ha carecido de un killer dentro del área y aunque Lionel Messi es el hombre que comanda el ataque, no es un delantero matón, sino un generador de futbol. Gonzalo Higuaín, quien juega más en el área, se caracteriza por fallar más de las que concreta, lo que le han costado críticas dentro y fuera de Argentina.
3.- Dependencia de Messi
Todas las jugadas en todos los partidos, el balón debe pasar por los pies de Lionel Messi. Los mejores partidos de la albiceleste son aquellos en los que Leo se echa el equipo al hombro, como contra Nigeria, pero cuando éste se cae o es secado por los fuertes dispositivos defensivos del rival, Argentina no tiene capacidad de reacción.
4.- Porteros poco confiables
Sergio Romero era el portero titular de la Selección, pero no acudió al Mundial por una lesión. Sin embargo, este arquero no ha destacado por ser un guardameta de élite, por ello ha permanecido como suplente del Manchester United durante tres años. Ya sabemos lo que pasó con Willy Caballero contra Croacia, lo que llevó a Sampaoli a jugar con Franco Armani, quien antes de la lesión de Romero era el tercer portero.
5.- El DT
¿Cómo entender y adoptar una idea futbolística si no hay una filosofía? Desde que terminó el Mundial de Brasil 2014, Argentina ha tenido tres estrategas. Gerardo “Tata” Martino dirigió las Copas América del 2015 y 2016 y perdió ambas en la final, por lo que en julio de ese último año presentó su renuncia. Tomó el cargo Edgardo Bauza, quien sólo dirigió ocho encuentros, de los cuales perdió tres y empató dos y a cuatro juegos de finalizar la eliminatoria sudamericana fue despedido. Fue entonces que llegó Jorge Sampaoli, de quien ya se espera su renuencia.