Durante la ceremonia en la que se entregó el Balón de Oro de la Liga MX 2017, uno de los momentos más chuscos fue protagonizado por el técnico del Guadalajara, Matías Almeyda.
El argentino contó cuando tuvo uso de la palabra, que algunos de sus futbolistas en las Chivas le hacen burla por el rostro de Jesucristo que tiene tatuado en uno de sus brazos, pues le dicen que se parece más a la cara del Gullit Peña, exfutbolista del Rebaño Sagrado que hoy prueba suerte en el balompié escocés.
“Mis jugadores dicen que tengo arriba tatuado al Gullit Peña”, dijo el Pelado en el Orpheum Theatre, Los Angeles, California, desatando las risas de los presentes.
Como buen argentino, Matías Almeyda tiene distintos tatuajes en el cuerpo, y el más reciente de ellos es el trofeo que acaba de conseguir el Guadalajara al coronarse como Campeón de Liga. Había prometido el escudo del club, pero cambió de opinión y mejor se “rayó” el galardón.