La victoria 3-1 del Manchester United sobre el Arsenal fue una verdadera joya. Un partido digno de recordar durante mucho tiempo y que seguramente será calificado como uno de los mejores, si no es que el mejor.
Y hay varios argumentos para decir esto. Es más, vamos a repasar cinco para que vean que fue un espectáculo digno de los dioses del futbol.
Las atajadas de De Gea
Con esto parece que ya no hay discusión sobre quién es el mejor portero del mundo en la actualidad. El español paró absolutamente todo lo que le tiraron y tuvo al menos tres atajadas que solo él podría hacer.
De Gea es una de las piezas más importantes de este Manchester United. Si no lo creen fueron 33 tiros del Arsenal con dirección a puerta por apenas 12 de los Red Devils. Aún así el marcador benefició al nacido en Madrid.
El nivel que mostró Pogba (antes de la expulsión)
Al minuto 74′ el francés perdió la cabeza e hizo una entrada de cárcel a Héctor Bellerín. A pesar de dejar a su equipo en inferioridad numérica el exjugador de la Juventus mostró por qué es que se pagaron más de 100 millones de euros por él.
El tercer gol es casi obra totalmente suya. Jugó con los defensas rivales a placer y dio dos asistencias. Su nivel está altísimo y los números lo corroboran: cuatro goles y cinco pases de anotación en sus últimos nueve partidos de Premier League.
Cuando Arsene quiere, arma un equipazo
A Wenger se le lesionó Shkodran Mustafi en el segundo tanto de los contrarios y se aventó una de locos. Cambió al defensa central por un jugador ofensivo como lo es Alex Iwobi. El director técnico mostró ahí que no tiene miedo y que prefiere perder con la cara en alto.
Si existen las derrotas dignas, esta fue una de ellas. Arsene echó a todo su equipo en frente, se hizo de la pelota y terminó con el 75% de posesión y con el doble de disparos que su rival. Como le pasa al Arsenal, lo que faltó fue contundencia y que no estuviera De Gea en frente.
La gran rivalidad
Serán jugadores nuevo, fichajes recientes pero en el aire se sentía ese odio deportivo que este partido tiene. Es único en Inglaterra a pesar de no ser clubes de misma ciudad, pero siempre hay esa sensación de que no se quieren ni tantito y harán de todo por vencer a su enemigo.
Es más, hasta al momento de gritar los goles se hacía con una mística especial, con una voz más fuerte, con un tono de guerra.
El camión de Mou
Sí, José Mourinho es de esos que si tiene la ventaja desde temprano, se va a defender con todo. El famoso “echar el camión” es todo un arte y no todos los entrenadores lo pueden hacer sin perder esa ventaja.
Mou es un maestro del juego defensivo y sobre todo, del manejo del partido sin pelota. Eso de salir a contragolpe y aniquilar al rival le ha dado muchos títulos y una reputación envidiable. A lo mejor no te gusta como juega, pero no hay duda que es efectivo.
