Shahak Shapira, un escritor israelí-alemán con un sentido del humor satírico, empezó un proyecto llamado Yolocausto. Se trata de combinar fotos que se sacan los turistas en el Monumento a los judíos asesinados en el Holocausto con imágenes de los campos de exterminio nazis.
Shapira pescó las fotografías en Facebook, Instagram, Tinder y Grindr e incluyó los comentarios, hashtags y likes con los que la gente acompañó su post. El resultado es tanto impactante como ligeramente cómico. ¿Qué diablos estaba pensando la gente cuando se tomó estas fotografías?
El monumento tiene como objetivo recordar y conmemorar a las víctimas del Holocausto. Fue diseñado por el arquitecto Peter Eisenmann y se extiende por 800 metros cuadrados de la capital alemana. Recibe muchas visitas, pero entre ellas hay gente que no sabe muy bien cómo comportarse. Al respecto, Shapira agregó una sección de preguntas en su sitio para responder a los que tienen dudas sobre qué se puede y qué no se puede hacer: “No hay otro evento histórico que se compare al holocausto. Depende de ti cómo te comportas en un lugar que recuerda la muerte de seis millones de personas”.
Y como Shahak Shapira es buenísima onda, ofrece la opción de quitar las fotografías. El correo al que se puede escribir para pedir salir del Yolocausto es: undouche.me@yolocaust.de
Tipazo.