La violencia nunca había sido tan entretenida como ahora. Y con entretenido no queremos decir que sea divertido, pues no son sinónimo y en muchas ocasiones ni siquiera se relacionan. Sin embargo, las historias de muerte y terror real atrapan a las audiencias como nunca antes lo habían hecho. Las razones pueden variar dependiendo de las circunstancias en que la historia se cuente, el momento en que sale, o bien, porque ésta tiene la capacidad de retratar un aspecto de la realidad de las personas que, si se lo presentan, se convierte en una forma de escape que también podría formar parte de sus fantasías.
Esta fórmula de éxito no es nueva. En la Antigua Roma, la gente se olvidaba de sus problemas con un poco de pan y circo: gladiadores peleando a muerte por un lugar en la arena mientras les aventaban pan. Problema resuelto. Quizá esta sea la prueba de que desde siempre, como si se tratara de una tradición milenaria, la violencia ha sido considerada como una forma de entretener y distraer a las masas.
El cine, las series, los programas de televisión, los videojuegos y todo lo que entra en el mundo del entretenimiento, como su nombre lo indica, tienen ese primer objetivo; sin embargo, la pregunta es la siguiente: Actualmente, en medio de una sociedad que se está matando a sí misma, ¿qué tan fiel es a su propósito?
¿Qué tan entretenido puede ser un videojuego que simula una masacre escolar?, ¿necesitamos una forma de entretenimiento en la que tengas la posibilidad de situarse en el lugar de una personas con serios problemas? Al parecer, los límites dicen que sí. Active Shooter es un videojuego que simula una tragedia escolar… en medio de un año en el que las manifestaciones en contra de la violencia con armas ha puesto en la cuerda floja a la sociedad norteamericana.
Este juego da la posibilidad de ser un agente de élite de SWAT o ser el tirador. En la página se puede leer: “Dependiendo del personaje, tu objetivo será proteger o cazar y destruir”… no sin antes advertir y pedir de favor que esto no se debe tomar en serio. Incluso, Active Shooter te da un estatus de juego en el que te dice cuántos civiles o policías has matado.
El lanzamiento de este videojuego llega a menos de un mes de que el tiroteo número 22 del año y que cobró la vida de 10 personas, se haya llevado a cabo. ¿Qué refleja la salida de un videojuego como este? No es la primera vez que un tiroteo escolar, por decirlo de alguna forma, se refleja en la industria.
Películas o incluso series sobre tiroteos son tan “recientes” como los mismos tiroteos. En 1999, salió Duck! The Carbine High Massacre como una comedia negra sobre Columbine. En 2003, a cuatro años de la masacre, el director Gus Van Sant estrenó la cinta Elephant, basada en esta misma tragedia. Esta cinta, a la fecha, representa lo poco que comprendemos de estos actos y su origen. Lo mismo para otras películas como Tenemos que hablar de Kevin de 2011 y más.
Desde Columbine, hace casi 20 años, comenzaron a señalarse a los videojuegos y las películas con clasificación alta como responsables de los actos de violencia en las escuelas. Sin embargo, esa idea se había ido apagando conforme el control y venta de armas auspiciada por la Asociación Nacional del Rifle y los grupos conservadores, se colocan como responsables directos que preferían señalar a la industria del entretenimiento como el primer factor.
Y hasta la fecha, nadie se decide.
