Tom Cruise es el rey de las películas de acción. Le han bastado seis producciones como Ethan Hunt en Misión Imposible, para convertirse en el digno representante de este tipo de cintas. Por supuesto, otros actores le han entrado a la contienda como Bruce Willis, Sylvester Stallone, Keanu Reeves, Liam Neeson, Daniel Craig, Pierce Brosnan, y más, pero ninguno como Cruise, un actor que incluso filma las escenas de acción más peligrosas para sus filmes.
Sin embargo, nada de esto le bastó para ser considerado como protagonista de la serie de televisión basada en la franquicia de Jack Reacher y cuyas películas protagonizó en dos ocasiones. ¿Por qué? Resulta que sí, Cruise hizo un gran trabajo como Jack Reacher en las películas, pero no lo suficiente para la producción televisiva porque… es muy chaparrito. Tal cual. De acuerdo con el creador del personaje, Lee Child, los fanáticos de los libros siempre se han quejado del tamaño de Cruise y la serie es momento para redimir ese “error”.
En una entrevista con BBC Manchester, Child comentó: “De verdad disfruté mucho trabajar con Tom Cruise. Es un gran tipo. Nos divertimos. Pero al final, los lectores tienen la razón. El tamaño de Reacher es muy, muy importante y es determinante para definir quién es. Así que tomé la decisión de que no habrá más películas con Tom Cruise. En su lugar, vamos a llevar la historia a Netflix para hacer algo. Una serie de televisión por streaming con un actor completamente nuevo”.
Tom Cruise participó en dos películas de Jack Reacher. Su primera aparición fue en 2012 para una segunda entrega en 2016. Las películas fueron bien recibidas por el público; sin embargo, la realidad es que nunca alcanzaron el estatus que ha conseguido desde 1996 la franquicia de Misión Imposible y que de acuerdo con IndieWire, la segunda parte no acumuló en taquilla lo que la primera. La otra parte es que, como mencionamos en un principio, sumó puntos al historial de acción de un actor que se ha manejado en diversos géneros y con grandes directores de la talla de Stanley Kubrick en Wide Eyes Shut de 1999 o Steven Spielberg en La guerra de lo mundos en 2005.
El tema, nuevamente, es debatible, pero no tan justificable como podríamos pensar. Al final, si vemos la luz al final del túnel para Cruise, el actor no necesita otra cinta de Jack Reacher. Este año se estrenó la sexta entrega de Misión Imposible y se convirtió en la más exitosa de la franquicia y la que mejor críticas ha recibido. Además, el actor se encuentra en medio de la producción de Top Gun 2: Maverick, una cinta que lo convirtió también en un sex symbol en las filas de Hollywood que ahora, a través de Reacher, quieren desecharlo.