El multiverso arácnido en el cine nos ha dejado muchas cosas épicas. Desde el encuentro de Tobey Maguire, Andrew Garfield y Tom Holland en No Way Home hasta las sorprendentes entregas animadas de Spider-Verse de Sony, el nombre de Spider-Man está más vigente que nunca.
Pero con todo eso a cuestas, todavía hay mucha gente que hace una pregunta bastante llamativa: ¿Cómo hubiera sido la versión del trepamuros de James Cameron?
Como recordarán varios fans, mucho antes de que Sam Raimi tomara las riendas para una película de Spider-Man, el afamado director de Titanic, Terminator y Avatar era quien se iba a rifar la misión de adaptar la historia de Peter Parker para el cine. E incluso, se decía que Leonardo DiCaprio iba a protagonizar ese proyecto.
Al final no sucedió y en cambio, tuvimos una genial trilogía dosmilera que dicho sea de paso, revolucionó por completo la industria de las películas de superhéroes. Y aunque ese legado es innegable, como dijimos, aún existe algo de duda de lo que pudo ser la saga arácnida de Cameron.
¿Cómo iba a lucir el Spider-Man de James Cameron?
La visión que James Cameron tenía de Spider-Man era bastante diferente de lo que uno supondría. Muy lejos de lo que hoy vemos en la mayoría del cine de superhéroes, el Spidey de este cineasta pintaba para desenvolverse en una trama mucho más cruda de lo que fue eventualmente en el 2002 con Raimi y Maguire.
“La mejor película que nunca hice”… Así se refiere el director en su libro, Tech Noir: The Art Of James Cameron (lanzado en 2021), a su cinta jamás realizada del superhéroe arácnido. Y en esa misma publicación –que incluye en algunas ediciones un prefacio de Guillermo del Toro–, él comparte algunos artes conceptuales de lo que visualizaba para el personaje insignia de Marvel.
Estas imágenes, si bien se publicaron en ese texto en el 2021, recientemente se hicieron virales gracias a que Chris Evangelista, editor del medio Slash Film, las publicó en Twitter.
La película de James Cameron iba a llegar en algún momento de la década de los 90, o al menos ese era el plan. Pero a diferencia de lo que pasó después en los 2000, en aquella época Marvel tenía serias dificultades para llevar sus franquicias al cine. Luego, vendría la venta de derechos cinematográficos a diferentes estudios y el auge total de los héroes de ‘la casa de las ideas’ en el nuevo milenio, pero eso es otra historia.
“Creo que hubiera sido muy diferente… Lo primero que debes tener en mente es que no es Spider-Man. Se hace llamar Spider-Man, pero no es Spider-Man. Él es Spider-Kid. Él es Spider-High-School-Kid. Es un poco geek y nadie se fija en él y es socialmente impopular y todo eso“, dijo Cameron en una entrevista con el medio Screen Crush sobre cómo veía al personaje en su versión.
Los cambios que se harían al personaje y otros detalles de la historia
Como decíamos, el Spider-Man de James Cameron iba a ser bien distinto de lo que vimos en cada una de las diferentes versiones venideras. Iba a haber cambios bastante importantes, pero el propio director ha dicho en un sinfín de entrevistas que cuando escribía el guión, siempre le contaba sus ideas a Stan Lee (el creador del héroe). James menciona que no agregó nada a su escritura con lo que Stan no estuviera de acuerdo.
Por fortuna, muchas de sus ideas fueron aceptadas. Básicamente, a él le podemos agradecer (si es que eso les gustó a los fans más acérrimos) que Peter Parker, en su primera aparición en el cine, lanzará telarañas de manera biológica y no a través de los conocidos cartuchos como lo hacía el personaje en los cómics. Sí, ese detalle lo retomó Raimi posteriormente.
Para Cameron, también eran importantes las analogías a los cambios físicos en la adolescencia. En la transformación tras el piquete de la araña y usando el recurso mencionado de la telaraña, se haría una referencia a la pubertad con una secuencia donde Peter despertaría cubierto de un líquido blanco y las sábanas de la cama pegadas a su cuerpo. La alusión a la masturbación y los ‘sueños húmedos’ iba a ser parte de la película.
Si bien el guión de James Cameron no estaba bien desarrollado para inicios de los 90, él tenía bien bajado cómo quería que fuera su historia. Quería que Peter Parker/Spider-Man, aún en este concepto superheroico de ser picado por una araña, viviera en el mundo real y tuviera los problemas de un chico de preparatoria común y corriente.
“Quería hacer algo que tuviera una especie de cruda realidad… Los superhéroes en general siempre me parecieron un poco fantasiosos y quería hacer algo que hubiera estado más en la línea de ‘Terminator’ y ‘Aliens’, que te llevan a la realidad de inmediato“, dijo a Screen Crush.
Otro cambio importante es que al parecer, sus villanos pensados para la primera película de Spider-Man serían Electro y Sandman. Sin embargo, los alter-egos de estos no serían ni Max Dillon ni Flint Marko como en los cómics respectivamente; Cameron iba a crear a sus propios personajes con los nombres de Carlton Strand para el enemigo de poderes eléctricos, y un tipo llamado Boyd para el Hombre de Arena.
Por otra parte, el Spider-Man de James Cameron se vería un tanto corrompido. Es decir, tras adquirir sus poderes, lo veríamos disfrutando un poco de su fuerza y de lastimar severamente a sus enemigos. También iba a ser un tipo con un lenguaje bastante ‘florido’, pues el director lo quería maldiciendo la mayor parte del tiempo.
El cineasta quería también un encuentro sexual (no se sabe qué tan explícito) donde Mary Jane y el trepamuros tuvieran relaciones en el puente de Brooklyn. Y bueno, el enfrentamiento final iba a ser con Strand/Electro en el World Trade Center, con Spidey salvando a MJ y revelándole su verdadera identidad en medio de la batalla (otro concepto que pudimos ver en el combate final de Spider-Man 2 de Raimi).
También puedes leer: ¡Parker, estás demente! El antes y después del elenco de ‘Spider-Man’ de Sam Raimi
Leonardo DiCaprio como protagonista y el cierre del proyecto que no sucedió
Mucho antes de que James Cameron hiciera Titanic, ya tenía en mente a Leonardo DiCaprio para el papel de Peter Parker. En 1993, que era el año en que el cineasta desarrollaba la historia de Spider-Man, Leo tenía 19 años y ya era uno de los actores jóvenes más prometedores de Hollywood.
Y se perfilaba como el gran favorito para el rol protagonista, aunque no sabemos si DiCaprio lo hubiera aceptado, esto en el entendido de actualmente el actor de plano le hace el feo a las películas de superhéroes y los proyectos de franquicias (si no, pregúntenle a Timothée Chalamet).
Pero más allá de si Leonardo hubiera aceptado o no el papel en el inicio de su fructífera carrera, hubo otro tema que complicó la realización de la película: los derechos cinematográficos.
A mediados de los 80, Cannon Films tenía los derechos en un acuerdo con Marvel. Incluso, algunos internautas rescataron un viejo teaser tráiler (sin actores, solo un anuncio animado que prometía una cinta live-action) de la película que les dejamos acá abajo. Pero el proyecto jamás avanzó.
Con los derechos cinematográficos de Spider-Man en el aire, James Cameron hizo lo posible por convencer a Carolco Pictures (que le habían producido Terminator 2) de que adquirieran la franquicia. Se intentó, pero la compañía se fue a la quiebra a mediados de los 90 y no había manera de hacerlo.
Entonces entro al quite Metro Goldwyn Mayer, que tuvo una serie de desacuerdos con Marvel sobre la adquisición. En medio de todo eso, James Cameron sugirió a 20th Century Fox (su nueva casa productora) que comprara los derechos, pero al parecer la compañía no pensó que eso fuera una buena idea por todo el embrollo legal que había en medio.
Con Marvel y MGM solucionando sus diferencias sin trato de por medio, y con Fox haciéndose a un lado por decisión propia a finales de los 90, Sony/Columbia Pictures vio la oportunidad de adueñarse de Spider-Man. Y bueno, el resto es historia que ya se saben con Raimi, Maguire, reboot con Andrew Garfield, reboot con Tom Holland en asociación con Marvel Studios/Disney, etcétera.
Como decíamos al inicio, Spider-Man está más vigente que nunca… Pero siempre quedará la incógnita de lo que pudo ser la versión de James Cameron.