Niños sin vigilancia y Amazon nunca serán buena combinación, al menos eso es lo que esta familia debió haber aprendido luego de que Katelyn Lunt, una pequeña de 6 años, ordenara 350 dólares en Barbies y un pony de juguete a través de la cuenta de su madre.
“Nuestra familia llegó a casa y el camión se detuvo para sacar todas esas cajas”, dijo Catherine Lunt, la madre de la pequeña a Good Morning America.
Hasta ese momento, Catherine no sabía nada. Previamente ella le había dicho a Katelyn que podía ordenar una muñeca como recompensa por haber ayudado con tareas extras en la casa, lo que ignoraba es que había pedido más.
¿No se dio cuenta? Catherine contó al medio que revisó la orden y pudo cancelar artículos que ella no reconoció, sin embargo, dos páginas de artículos ya habían sido enviadas.
Aunque se trató de un gesto inocente, la familia consideró que Katelyn no podía quedarse con todas las muñecas, por lo que aprendieron la lección y decidieron donar los juguetes a la Primary Children’s Hospital en Salt Lake City, Utah.
Este no es el primer caso en el que el descuido de los padres termina por hacerles un agujero a sus carteras cuando no supervisan las compras en línea de sus hijos. Según informa ABC News, el año pasado Brooke Neitzel, una pequeña de 6 años oriunda de Dallas, Texas, ordenó a través de Echo una casa de muñecas de 160 dólares y casi dos kilos de galletas.
“Solo le pregunté (a Alexa, el asistente de Amazon) si podía pedir una casa de muñecas y algunas galletas. Ella dijo ‘¿Quieres esto?’ y yo dije que sí”. contó Brooke a un medio local.
Respecto a ese caso, Amazon dijo a ABC News que “Debes pedirle a Alexa que ordene un producto y luego confirmar la compra con una respuesta de ‘sí’ para comprar por voz. Si le pides a Alexa algo por accidente , simplemente debes decir ‘no’ cuando te solicite confirmar. También puedes administrar tu configuración de compras en la aplicación Alexa, como desactivar la compra por voz o solicitar un código de confirmación antes de cada pedido”.
