¿Momento incómodo? Sí, pero también necesario. Si hay puros hombres nominados para Mejor Director en los Golden Globes, no todos, o mejor dicho todas, se van a quedar calladas. Y la prueba fue que Natalie Portman y Barbra Streisand, de dos formas distintas, dijeron algo que hizo sentir a la mayoría muy incómodos… y con mucha razón.
Este 2018, un año que le está dando la bienvenida a una revolución cultural en la igualdad de género dentro de la industria del entretenimiento, le aplaudió a una lista de nominados en la que las mujeres brillaron por su ausencia. Estamos hablando de los nominados para el máximo galardón como Mejor Director. Guillermo del Toro, quien se lo llevó a casa, Martin McDonagh, Christopher Nolan, Ridley Scott y Steven Spileberg, compitieron por el premio. Sin embargo, ¿había el nombre de alguna mujer? No.
Y no es por falta de nombres, porque incluso había una mujer presente llamada Greta Gerwig que presentó una de las mejores películas del año, Lady Bird…
Por eso, dos de las mujeres más importantes en el mundo del cine, vestidas totalmente de negro para apoyar el movimiento Time’s Up, dijeron lo que nadie quería o temía escuchar. ¿Por qué no hay mujeres nominadas en esta categoría?
Natalie Portman, junto a Ron Howard, presentó a los nominados y al ganador como Mejor Director haciendo un pequeño pero nada sutil llamado: “Y aquí están todos los nominados hombres…”. Y con ese “all-male” dejó muy claro todo.
Natalie Portman calling out the all-male nominees in the best director category is extremely a 2018 mood. #GoldenGlobes pic.twitter.com/Q2L7ieDBjm
— Michael Blackmon (@blackmon) 8 de enero de 2018
Para presentar a la película ganadora, Barbra Streisand pasó al escenario no sin antes contar su historia, que si lo ponemos en perspectiva, es la historia de todas. Streisand es la única mujer en la historia que ha recibido un Golden Globe como mejor directora. La única. Y de eso ya tiene más de 34 años, en 1984 por su trabajo en Yentl.
“He sido la única mujer en ganar el premio como Mejor Director y eso fue en 1984. Hace 34 años. Amigos, ¡el tiempo se les acabó!”.