Las películas no serían lo mismo sin un director de fotografía, estos genios logran enmarcar la historia de una manera tan impresionante, que muchas veces recordamos más la fotografía de una cinta, que la trama.
El día de hoy el mundo del cine se viste de negro, pues murió a la edad de 103 años el reconocido director de fotografía Douglas Slocombe.
Nació el 10 de febrero de 1913 en Londres, aunque después su familia se mudaría a París. Su carrera comenzó realmente como fotoperiodista para la revista “Life” y el periódico “Paris-Match”, antes de la segunda Guerra Mundial. Y filmó el documental Lights Out de Herbert Kline que narraba los acontecimientos previos a la guerra en Europa.
Después de la guerra se fue a los Estudios Ealing como operador de cámara, donde tuvo su primer trabajo como cinematógrafo en la cinta Dead of Night de 1945, donde alcanzó un amplio reconocimiento por el toque realista que daba a las películas, como Kind Hearts and Cornets, The Man in the White Suit, The Lavender Hill Mob y más.
Tras abandonar Ealing, comenzó a hacer freelance, pues no quería estar atado a un solo estudio. Trabajó en más de 84 películas en 47 años, como Saraband for Dead Lovers , The Great Gatsby, Freud: The Secret Passion, The Fearless Vampire Killers ,The Italian Job, The Music Lovers, The Maids y Never Say Never Again.
Tal vez uno de sus trabajos más conocidos sea el que realizó junto a Spielberg en Indiana Jones and the Temple of Doom, Raiders of the Lost Ark y Close Encounters of the Third Kind .
Fue nominado tres veces al Oscar por Mejor Fotografía, por Raiders of the Lost Ark, Julia y Travels with my Aunt; fue nominado 11 veces a los BAFTA, donde ganó por Julia, The Great Gatsby y The Servant.
Descanse en paz.