El que una serie de televisión haya perdurado en las pantallas por 20 años es bastante impresionante. Por mucho tiempo, Gunsmoke una serie western transmitida de 1955 a 1975, fue considerada la serie más larga de la historia de la televisión. Durante ese tiempo acontecieron sucesos históricos como el Movimiento por los Derechos Civiles de los Afroamericanos, la muerte de John F. Keneddy, la llegada del hombre a la luna, entre otros. Es más, The Beatles se formó y se separaron durante el tiempo en que Gunsmoke estuvo al aire.
A pesar de que 20 años es mucho tiempo, Gunsmoke dejó esta semana de ser la serie de televisión más larga de la historia. Ahora esa distinción la tiene cierta familia amarilla de Springfield: Los Simpsons.
Con 29 temporadas (y dos más por venir) y 639 episodios emitidos a la fecha, Los Simpsons hicieron historia al convertirse en la serie de televisión, así como la serie animada, más duradera. Cuando la serie hizo su debut en television el Nintendo (el que parecía videocasetera) era la consola de moda, en Estados Unidos George H. W. Bush tenía pocos meses en la oficina oval, mientras que en México el presidente era Carlos Salinas de Gortari.
Durante casi 30 años, nos han regalado grandes momentos y, sobre todo, frases que sin duda más de uno repite en su vida diaria. Desde el clásico “D’oh” de Homero, hasta el “Mi Homero no es comunista. Podrá ser mentiroso, puerco, idiota, comunista, pero nunca una estrella de porno” del Abuelo. Sin mencionar grandes lecciones como el bailer funky/defensa personal. Son tantos que cualquier lista que intente seleccionar “los mejores” se quedaría corta.
A pesar de que no está exento de controversias, la más reciente siendo la representación de Apu, y a pesar de que algunos piensan que ya no tienen la gracia de antes (“Mi vieja mula ya no es lo que era”), muy en el fondo sabemos que la vida en sin Los Simpsons no sería lo mismo, y aunque a veces los dejemos de ver, sabemos que siempre podremos poner uno de los viejos capítulos y volver a reír a carcajadas.