A lo largo de tantos años de carrera, Liam Neeson nos ha demostrado que es capaz de hacer todo con tal de proteger a su familia, que por alguna extraña razón siempre termina envuelta en toda clase de situación extrañas. Todo comenzó en 2008 cuando interpretó a un agente jubilado de la CIA en Taken, y fue así como Hollywood descubrió que podrían convertirlo en otro sujeto “indestructible” a la altura de Bruce Willis, Arnold Schwarzenegger, Jean-Claude Van Damme, entre muchos más.
Claro, probablemente Neeson ya está grande para realizar todas estas maniobras sin que le agarren los achaques al día siguiente. Esto se debe a que cuando salió Taken el actor ya tenía 56 años de edad, y a casi una década de su estreno ha hecho oficial su retiro de las películas de acción por una simple y sencilla razón: ya está “demasiado viejo”
Me siguen ofreciendo grandes cantidades de dinero por hacer ese tipo de cosas. Mi reacción es como “Chicos, tengo 65 jodidos años”. La audiencia eventualmente comenzará a pensar “¡Ya Basta!”
A pesar de esto, Liam Neeson aun tiene un par de cintas de este tipo próximas a estrenarse como The Commuter y Hard Powder (que será su última entrega), donde interpretará a… ¿un conductor de una máquina quita nieve que pelea contra narcotraficantes?