El día de hoy se cumplen 60 años de la muerte de uno de los actores más prometedores de Hollywood, James Dean, que por desgracia el 30 de septiembre de 1955 perdió la vida por un aparatoso accidente de auto.
Comenzó realizando pequeños papeles en cine, teatro y televisión, hasta que su gran oportunidad llegó en 1954 cuando le ofrecieron el papel principal para la película Al este del Edén de Elia Kazan, comenzando así su popularidad en Hollywood y su primera nominación al Oscar. Después interpretó a Jim Stark de Rebeldes sin causa, siguió con Gigante donde interpretó a Jett Rink, por el cual tuvo otra nominación al Oscar, aunque esta última fue póstuma.
Una de las aficiones de James Dean eran las carreras de autos, durante la grabación de Gigante adquirió un Porsche Spyder 550 y cuando terminó de filmarla, decidió que quería participar una vez más en una carrera de autos.El 30 de septiembre de 1955 asistiría a Competetions Motors, para correr su auto y ganar una apuesta, en un principio el porsche sería llevado en un remolque, pero decidió conducirlo algunos kilómetros a lo largo de la costa. Cuando llegó a una intersección de la carretera, un Ford se le cruzó a gran velocidad, el cual Dean no pudo esquivar y su coche se incrustó en el otro, se rompió el cuello y perdió instantáneamente la vida a los 24 años.
La última fotografía que se tiene de James Dean vivo es la siguiente, donde se ve al actor en una gasolinera con su Porsche, fue la última parada que hizo junto con su mecánico antes de dirigirse a la carrera.
Mucho se ha especulado sobre su muerte, que si fue planeada o no; pero lo que sí es verdad, es que fue una gran perdida para el mundo del cine de esa época.
