La Gaviota, una de las obras más emblemáticas de Anton Chéjov se está presentando en el Foro Shakespeare con una excelente puesta en escena dirigida por Diego del Río. Dos de los personajes que más resaltan en la obra son el frustrado Sorin, interpretado por Odiseo Bichir y la completamente egocéntrica Arkádina, llevada a la vida por Blanca Guerra.
Tuvimos la oportunidad de entrevistarlos a ambos y conocer su punto de vista sobre los personajes, la genialidad de Chéjov y su opinión sobre el teatro actualmente.
Entrevista con Blanca Guerra
Sopitas.com: ¿Cómo fue para ti el adaptarte al personaje de Arkádina?
Blanca Guerra: Creo que todo fue un proceso. Yo ya había hecho este personaje hace 15 años entonces cuando Diego (del Río) me dijo “hagamos la obra” yo dije “ok, eres un chico joven, la propuesta que tienes de puesta en escena es distinta, sí quiero tener esa experiencia.”
Quiero mucho a Diego y siempre quisimos hacer algo juntos, hay gente con la que ya he trabajado aquí en el grupo, entonces vivimos un proceso en el que yo le dije “me pongo en tus manos, tú me vas a llevar de la mano a donde tú quieras siempre y cuando esté yo de acuerdo” y siempre estuve de acuerdo.
El nos da siempre la confianza como para que cada ensayo siempre estemos creativos, siempre salgan cosas nuevas entonces fue mucho gracias a la guía de mi director y el trabajo con los demás.
Sopitas.com: Es un personaje muy interesante el que interpretas por la dualidad que tiene entre que es un tanto detestable y encantadora al mismo tiempo.
BG: Y es muy conmovedora también, es un arco muy importante. Dentro de los personajes del teatro, Arkadina es creo uno de los más ricos porque tiene un arco muy pronunciado.
Va de la comedia al melodrama, a la tragedia, entonces es muy interesante.
Sopitas.com: Y pasa de un estado al otro a veces en un instante.
BG: Los personajes de Chéjov así son también, pasan de un lado a otro tan rápidamente como su estilo lo indica en todas sus obras pero sobre todo Arkadina, sobre todo los rusos, ellos son así.
Son melodramáticos de pronto, son intensos y Arkadina no podía quedar atrás, es una mujer egocéntrica, sumamente temerosa de verse por dentro, de quedarse sola, puede sacrificar todo menos su quehacer, su prestigio y ser el centro de atención.
Sopitas.com: La obra se escribió a finales de siglo XIX pero se sigue sintiendo muy actual.
BG: Eso tiene Anton Chéjov, es todo un clásico, toda la esencia humana que plantea en sus obras corre hasta nuestros días.
Tenemos diferencias con la idiosincracia rusa y el contexto y la época en que se escribió, sin duda pero finalmente la esencia del comportamiento del ser humano ahí está.
Es muy interesante que, al igual que la música, aquellos músicos que hicieron un rompimiento con lo establecido por sus antecesores siguen siendo vigentes.
Entrevista con Odiseo Bichir
Sopitas.com: ¿Cómo fue el proceso para meterte en este personaje?
Odiseo Bichir: Todo bajo la dirección y las indicaciones muy precisas del director.
Diego del Río es un director muy talentoso, cuidadoso, preciso, de una impresionante pulcritud, nada se le escapa, está en todo y desde el principio del proceso de trabajo ya sabía que quería en todos los departamentos del montaje así que fue muy estimulante que estuvieran todas esas decisiones tomadas.
Mi trabajo consistía en adaptarme, en seguir sus indicaciones. Este ritmo que trae mi personaje y el tiempo con el que se mueve y la tos crónica, los achaques, el deseo de estar dormido todo el tiempo y de hacerlo a la menos provocación me viene acompañando desde que inicié el proceso de trabajo así que se nota que permea en tu vida real y es lo que siempre sucede.
Es la diversión que te ofrece este trabajo, que quienes te tratan fuera de la escena se divierten mucho con la caracterización que te toca hacer en cada proyecto porque la llevas a tu casa y a todo lugar. A mi me encanta que suceda.
Me siento muy cercano al personaje porque a mi me gusta la vida del campo, me gusta disfrutar de la conexión con la naturaleza y a este personaje no se le hace fácil ni cómodo, es al revés.
Este personaje me ha invitado a asomarme a un tipo de vida que no es la que yo acostumbro.
Es un hombre que ya está libre de manejar sus propios horarios, de escoger su propia comida y hacer lo que quiera pero que ya la tos no lo deja en paz, lo molestan dolores de cabeza, agruras y al mismo tiempo no quiere que lo consideren un hombre avejentado que necesita de cuidados porque el quisiera seguir comiendo, bebiendo y fumando todo lo que pueda
Sopitas.com: Y es la constante con todos los personajes, todos son muy contradictorios.
OB: ¡Exacto! Siempre están diciendo que quieren una cosa pero no ayudan mucho para lograrla, sus actos no apoyan ese anhelo que verbalizan.
Se quejan de una cosa pero van corriendo detrás de eso que los atormenta, lamentan no tener la vida que soñaron. Parece que tienen la solución a sus problemas está a la mano y no las aprovechan entonces es desesperante.
Es un golpe de genialidad de Chéjov de mostrarnos a estos personajes de forma entrañable, es una mirada muy compasiva y generamos empatía con los personajes y no podemos evitar pensar “a ver si no estoy haciendo yo lo mismo”.
Sopitas.com: Es interesante que es una obra de teatro que habla sobre el teatro y el comentario de la obra se extiende no solo al rate en general, sino a cómo somos como seres humanos, como somos muy ciegos ante cosas muchas veces muy simples.
OB: Somos miopes, ciegos, desconsiderados, poco atentos, distraídos en extremo, nos dejamos vencer por un tedio y una frustración que podríamos derrotar si nos lo propusiéramos y tiene que ver con eso, con como nos descalificamos.
Consideramos que las grandes obras de la humanidad, los grandes aciertos y descubrimientos son siempre producto de seres que no tienen nada que ver con nosotros, que nosotros nacimos para el fracaso y que nunca sabremos lo que es una idea que valga la pena.
Sopitas.com: Tú tienes muchos años de experiencia en el teatro. ¿Qué piensas del estado del teatro en México actualmente?
OB: Hay enorme talento; tenemos escritores, dramaturgos, actores, personas que hacen todo eso junto, que saben como llegar a su público, que no se dejan detener por falta de espacios.
El problema sigue siendo la gran demanda de lugares para presentar su trabajo. Los recursos económicos para montar una producción son siempre inalcanzables, se necesitan enormes esfuerzos, hay un gran ingenio, creatividad y talento, sin duda en este país.
A pesar de todos los obstáculos que se les pueden presentar, logran conectar con su público, tenemos un espíritu indomable y somos generosos porque no hemos estallado en mil pedazos, todavía conservamos algo de serenidad y paciencia como diría Kaliman.