Japón siempre ha destacado por su impresionante desarrollo de tecnología, pero sobrepasaron todas las expectativas con su nuevo tren bala, que se convierte en el más rápido del mundo al superar los 360 km/h, pero además, es mucho más silencioso que sus predecesores y en caso de emergencia, llega a operar sin electricidad y sigue funcionando aún en caso de terremoto.
Se trata del tren bala N700S, el titán más nuevo en viajes ferroviarios; la ‘S’ no es otro acrónimo más que de ‘Supremo’, para “resaltar la progresión en diseño, tecnología y comodidad”. Y para aquellos que se preguntan, para que el proyecto se hiciera realidad no tuvieron que destruir hectáreas completas de reservas ecológicas, ni tampoco afectó a la biodiversidad., ¿verdad, Tren Maya?
Aunque se tenía planeado que la inauguración del nuevo medio de transporte ultra rápido coincidiera con la apertura de los Juegos Olímpicos de Tokio, ahora que tuvieron que retrasarse debido a la crisis sanitaria mundial, la compñá nipona ‘J ail Pass’ decidió poner el N700S en operación a partir del primero de julio del 2020 viajando en la línea “Tokaido Shinkansen”, que une la estación de Tokio y la estación ‘Shin’ en la ciudad portuaria de Osaka, ofreciendo increíbles vistas desde las ventanillas.
Regularmente la velocidad siempre está asociada al peligro, pero los desarrolladores del N700S, se han encargado de desmitificarlo, ya que a pesar de su gran rapidez, el tren bala solo tiene permitido utilizar los 360 km/hr en caso de emergencia, regularmente viaja a 258 km/h por seguridad de los pasajeros
El tren bala más rápido también es sustentable
Si bien es similar en apariencia a otros trenes de la serie N700, tiene un frente más ‘aerodinámico y angular’, un diseño de faro más elegante y un logotipo dorado. Sin embargo, es el lado de la ingeniería donde las cosas se ponen realmente impresionantes. Además su nuevo sistema de suspensión activa, lo hace mucho más ecológico, ya que en lugar de añadir más motores o caballos de fuerza, su diseño aerodinámico, ayudará al tren a absorber cualquier movimiento durante un viaje, así como un control automático mejorado y un sistema de frenado más fuerte que garantiza una parada rápida en caso de emergencia.
Además, El desarrollo histórico es el sistema de autopropulsión de la batería de iones de litio, que impulsará el tren en caso de un corte de energía, permitiendo que los pasajeros sean transportados a un lugar seguro incluso en caso de un terremoto, como informa CNN.
Estas actualizaciones requieren menos espacio debajo del tren, lo que permite que las configuraciones de los vagones más flexibles, lo que a su vez ayuda a reducir el consumo de energía y acelerar los tiempos de producción, todo con el objetivo de sorprender a los operadores internacionales. En cuanto a la experiencia del pasajero, ha habido otras mejoras: asientos más cómodos que se reclinan aún más.
Además, hay tomas de corriente en cada asiento de los 16 vagones ; iluminación interior más relajante; hasta seis cámaras en cada vagon; y áreas de almacenamiento y por si fuera poco, un lugar para guardar las bicicletas de los ciclistas que así lo requieran.
El N700S tiene nariz y orejas
Cualquiera pensaría que las similitudes entre un tren y cualquier animal, es nula, pero eso era antes del tren bala N700S. Y es que, cuando los diseñadores pensaron en la aerodinámica para añadir mayor velocidad, añadieron una “nariz” aerodinámica de 22 metros que mitiga ese efecto de entrar y pasar por túneles a estas velocidades de vértigo.
Mientras que para mejorar el sistema de frenado, incluyeron frenos electromagnéticos y también frenos aerodinámicos en el techo a los que se les ha llamado “orejas de gato”. El objetivo de tener ambas opciones es el de poder lograr un frenado lo más rápido posible en caso de que se avise de terremoto: con estas medidas se estima que se podrá frenar el tren desde la velocidad máxima en una distancia de menos de cuatro mil metros
El tren bala del futuro
Japón se ha esforzado por convertirse en un hito en maquinaria de velocidad, pero lo que hemos visto hasta ahora, incluyendo el tren bala más rápido del mundo, se quedan cortos con los planes que tienen los nipones para revolucionar los trenes como hasta ahora los conocemos, llegando a reducir hasta ocho horas los trayectos que regularmente se hacen en un día, haciendo los viajes en tren casi tan rápidos como en avión ¡Increíble!
Por ejemplo, para el 2030 se contempla estrenar un nuevo tren bala que viaje de Tokio y Sapporo con una distancia de 1.075 km que se completará en cerca de 3 horas, casi equiparable a los 90 minutos que se hacen por aire. Nada comparado con los planes que se tienen para el 2027 con el tren bala “Maglev”, el cual pretende convertirse duplicar la velocidad del N700S, al alcanzar los 603 kilómetros por hora sin tocar el suelo, robándose el título del tren más rápido del mundo.