La lista de estrenos de películas programados para 2023 que han creado muchas expectativas es larga. Pero sin temor a equivocarnos, podemos decir que la que más confusión, risas y preguntas ha provocado, es la de Cocaine Bear (crikoso, pa’ los cuates), la cual nos trae una historia bastante interesante, extraña y sangrienta sobre un oso adicto a la cocaína.
Cocaine Bear está dirigida por Elizabeth Banks y, está conformada por un cast con Keri Russell, O’Shea Jackson Jr. y Christian Convery, entre otros. Si bien los nombres son reconocidos en la industria, lo que llama la atención de esta cinta es la historia y el protagonista principal: un oso que se vuelve adicto a la cocaína.
‘Cocaine Bear’ es una película basada en un hecho real… ¿surreal?
Sin afán de hacerles spoilers, Cocaine Bear nos cuenta cómo los habitantes y turistas de una localidad pequeña, tienen que unirse para sobrevivir al caos y la destrucción que ha causado un oso negro que se volvió adicto a la llamada ‘caspa del diablo’.
Más allá de la sangre y el tema de las drogas, la película de Cocaine Bear tiene su respectivo toque de comedia que, para ser honestos, no es el gancho, pues a la mayoría de las personas les llama la atención esta cinta porque está inspirada en un hecho que ocurrió en la vida real. Tal cual, un oso aspirando coca… bueno, más o menos.
El cocaine bear fue un oso negro de 1985
¿Eso quiere decir que existió un oso adicto que causó decenas de muertes? No exactamente. Cocaine Bear es más una versión muy exagerada (mucho) de lo que le ocurrió a un oso negro estadounidense en los bosques de Georgia, en los límites de Tennessee, durante 1985.
La historia del ‘oso crikoso’ comenzó el 11 de septiembre de 1985 cuando un dealer llamado Andrew Thornton decidió huir con más de 100 kilos de cocaína en una avioneta, la cual durante el viaje, comenzó a tener problemas por el peso que llevaba.
La avioneta de un traficante se estrelló y esparció varias bolsas de cocaína en Georgia
Thornton tuvo la gran idea de tirar algunos paquetes de droga para aligerar el peso, pero no funcionó y no le quedó de otra más que lanzarse al vacío con un paracaídas roto. Resumiendo, Thornton murió y kilos de cocaína quedaron regados al norte de Georgia.
La policía encontró el cuerpo de Andrew Thornton con las llaves de la avioneta y dedujo que ésta se estrelló con el cargamento de droga. Durante varios meses realizaron una búsqueda de los paquetes en cuestión y cierto día se toparon con 40 kilos de cocaína y un cuerpo sin vida.
Un oso de 80 kilos encontró y se comío varias de ellas
Sí, ocurrió lo que seguro se imaginan: encontraron muerto a un oso de 80 kilos a un lado de varias bolsas de cocaína. Un médico forense realizó los estudios y comprobó que el animal murió de una sobredosis, pues el pobre se comió varios gramos de la droga que se encontró en el bosque.
El caso fue bastante sonado en Estados Unidos que incluso el Kentucky Fun Mall, un centro comercial de la zona, es famoso por supuestamente tener al oso disecado en su tienda. Algo que se logró gracias a un cantante llamado Waylon Jennings, quien donó al oso que fue encontrado en la parte del bosque que era de su propiedad.
Murió de una sobredosis, aunque ‘Cocaine Bear’ plantea una historia distinta
Aunque en la vida real ninguna persona murió a causa de un oso adicto a la cocaína, Cocaine Bear justo muestra (de manera irónica) lo qué quizá hubiera ocurrido si el oso se hubiera vuelto loco y comenzara a buscar más de ese polvo blanco que se meten por la nariz.
Sin duda, una de las cintas que más dará de qué hablar a partir de su estreno este 16 de marzo de 2023. ¿Quién ya está esperando ansioso para ir a verla?