HBO se llevó 137 nominaciones en los Premios Emmy y un total de 34 premios en series como el programa de variedad Last Week Tonight with John Oliver y varias producciones de muy alto perfil como Chernobyl, la cual se llevó la categoría principal de Mejor Serie Limitada entre otros Emmys como Dirección y Guión.
Otra de las series que se perfilaron alto fue Sharp Objects, la cual se fue, sorpresivamente, con las manos vacías, sobre todo en la categoría de Mejor Actriz en Serie Limitada en la que estaba Amy Adams. Sin embargo, la más destacada siempre fue Game of Thrones, serie de ocho temporadas que llegó a su final este 2019 con un total de seis episodios que dividieron a las audiencias como muy pocas series lo han hecho.
El final dejó mucho qué desear a los seguidores de Game of Thrones considerando el ritmo y el desarrollo de los personajes, pero más el desenlace por sí mismo en el que se dejó de lado todos los elementos de fantasía (quizá lo más fascinante) para dar paso a la historia política.
Por eso, las 32 nominaciones de Game of Thrones para los Emmy 2019, fueron una sorpresa. La mayoría, es justo decirlo, se fueron a aspectos de la producción que los tienen bien merecidos conocidos como los Creative Awards. De aquí se llevó 10. Pero son las nominaciones un poco más “superficiales”, o que son del interés general, las que más interés tienen como Actor y Actriz de Reparto, Principales y hasta la máxima categoría de Mejor Serie Dramática.
De 11 nominaciones presentadas en la ceremonia de los Emmy, sólo se llevaron dos, es decir, un total de 12 premios, siendo la más ganadora de esta edición de los premios. La primera fue la de Peter Dinklage, quien interpretó a Tyrion Lannister en Game of Thrones.
Dinklage se llevó el Emmy en Actor de Reparto en Serie Dramática frente a grandes actores y algunos favoritos como Jonathan Banks y Giancarlo Esposito de Better Call Saul, Michael Kelly deHouse of Cards, Chris Sullivan de This Is Us y dos de sus colegas de Game of Thrones, Alfie Allen y Nikolaj Coster-Waldeau, quienes dieron vida a Theon Greyjoy y Jaime Lannister.
El segundo fue en la máxima categoría de los Emmy Awards, la de Mejor Serie de Drama. Era una de las favoritas, pero las probabilidades se pensaban serían bajas por la recepción de las audiencias y la crítica. Sin embargo, el Emmy fue un reconocimiento a toda la serie y no sólo a la última temporada, la cual definió cada uno de sus episodios como una película dentro de un mismo universo.
La temporada final no fue del gusto de la mayoría, incluso algunos actores de la serie hablaron sobre el cierre de la serie, pero eso no quita que la producción haya sido grande y la serie haya estado bien escrita. En nuestra reseña de la temporada final de Game of Thrones hablamos del impacto cultural de la serie en distintos niveles dentro mismo de la industria del entretenimiento y la forma en que se escriben, producen y ven las producciones para televisión.
“Hablamos de una serie que rompió todo nivel de audiencia y logró lo que ninguna otra, acumular un mayor número de espectadores con el tiempo. Grandes series han desfilado en nuestra televisión o dispositivos móviles, es justo decirlo, pero ninguna como esta… Su impacto e importancia ha sido tan grande, si quieren en las primeras siete temporadas, que resultaba imposible complacer a todos“.
Pero insistimos, la serie se mantuvo grandiosa en su producción, y más en su narrativa visual a la que los creadores le apostaron todo con referencias políticas e históricas que si bien parecen obvias, también lo son necesarias.