Ali Abbasi está de regreso este 2024 con The Apprentice, una película que forma parte de los estrenos internacionales en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM). Ya tuvimos oportunidad de verla, y desde ahorita les decimos que es una de nuestras favoritas del año.
The Apprentice está protagonizada por Sebastian Stan y Jeremy Strong, y nos lleva por un intenso recorrido entre las décadas en las que Donald Trump pasó de ser un hombre de negocios rico dentro del mercado inmobiliario a un multimillonario farandulero que, de alguna manera, revitalizó la ciudad de Nueva York.
Ahora bien. Eso suena un tanto aburrido si pensamos que los detalles de la vida de Trump, sobre todo en los últimos años (o mejor dicho, desde que asumió el periodo presidencial en Estados Unidos en 2016), ya han sido expuestos. Sin embargo, lo que hace Abassi es llevarnos a la relación más importante de su vida profesional y pública: la que mantuvo con su abogado Roy Cohn. Pero vamos por partes…
¿De qué trata The Apprentice?
The Apprentice arranca a inicios de la década de los 70 cuando un joven Donald Trump intenta potenciar el negocio de bienes raíces de su familia (la cual lo crió en el área de Queens siendo moderadamente ricos). Trump tenía una visión muy clara: convertir a Nueva York en la ciudad más codiciada del mundo.
¿Cómo pretendía hacerlo? Tomando edificios y terrenos abandonados en el Midtown de Manhattan, construir complejos de lujo, y así, revitalizar las zonas. Y al mismo tiempo, apropiarse de esos espacios ajustando los costos de vivienda y enfrentándose al gobierno por una reducción de impuestos.
Desde fuera, su visión era imposible, por decir lo menos. En ese momento Nueva York atravesaba una crisis económica en la que el Estado no se podía dar el “lujo” de reducir los impuestos a los más ricos. Pero lo logró (inserte meme de “ese maldito hijo de p**** lo logró”), y la pieza clave en ese acuerdo fue el abogado Roy Cohn.
Roy Cohn era una figura más cercana a un gángster que a un abogado, pero ahí es donde radicaba su éxito. No sólo tenía un montón de políticos en la bolsa, sino que aplicaba métodos, incluso ilegales, para someter, chantajear y comprar los votos o el silencio de las personas involucradas en sus casos. Y siempre ganaba.
Cohn hizo ganar a Trump. Pero no sólo eso. Roy construyó al Donald Trump que conocemos ahora, y lo hizo al enseñarle sus tres reglas básicas para el éxito: atacar, atacar, atacar; nunca admitir nada y siempre negarlo todo; y nunca admitir una derrota.
Lo que resulta aterrador al cierre de The Apprentice es reconocer que esas reglas siguen siendo aplicadas por el candidato republicano a la presidencia del país más poderoso del mundo…
¿The Apprentice debería estar en la temporada de premios?
The Apprentice es una de las mejores películas que hemos visto este 2024. Cada uno de sus aspectos construyen una historia que en la superficie podría parecer conocida, pero que está contada de tal manera que parece más un tratado de “cómo hacer que un crimen parezca un negocio exitoso“. Es una locura.
Y al ser ya una de nuestras favoritas, apostamos a que The Apprentice aparecerá en la temporada de premios. Sabemos que lanzamos una moneda al aire porque el título no ha obtenido la atención que merece; pero les prometemos que es una joya y que no sería una locura verla nominada.
Por eso, acá hablamos de las categorías en las que nos gustaría que The Apprentice aparezca y el porqué de cada una.
Foto: Douglas DeFelice-Getty Images.
Mejor Película
Somos de la idea de que si la mayoría de los aspectos de una película, por separado, son destacados, entonces el panorama completo lo es aún más. Y quizá suena muy simple, pero de ese modo podemos hablar de una muy buena película.
Y este es el caso de The Apprentice. No se trata de una biografía común y corriente, tampoco de los orígenes de un villano y muchos menos se trata de una caricatura o una sátira. Nada de eso. Esta cinta nos presenta a un Trump completamente manipulable, un sujeto que a falta de personalidad e identidad, asume la primera que le impresiona (relacionado, en parte, a la compleja relación que tenía con su padre).
De verdad agradecemos que The Apprentice no se exceda en la representación de Trump. Y esto lo decimos no porque se deba tener cuidado con la figura, sino porque el relato le permite al espectador reconocer la caricatura que Trump construyó de sí mismo.
Mejor Director
The Apprentice es el cuarto largometraje de Ali Abbasi, y nos atrevemos a decir que es el más destacado de su carrera. Esto es mucho decir porque entre sus cintas está Border de 2018 y Holy Spider de 2022.
Mencionamos el nombre de Ali Abbasi en nuestra wishlist de nominaciones porque construyó una biografía centrada en el drama, con un montón de elementos de comedia (involuntaria en cuanto a los personajes, no en la historia como tal) y detalles que la acercan al thriller.
Y también lo hacemos porque si la Academia aplaude el trabajo de cineastas como Adam McKay, entonces, con The Apprentice, hay cabida para alguien como Abbasi, sin olvidar lo diversa que es su filmografía a pesar de ser tan corta.
Mejor Actor de reparto
Sebastian Stan toma el protagónico de The Apprentice al interpretar a Donald Trump. Y lo hace de manera excepcional. Lo mismo decimos de Maria Bakalova como Ivana Trump. Sin embargo, la película se la lleva por completo Jeremy Strong al interpretar a Roy Cohn.
De estos tres personajes, es justo decir que el menos interesante es el mismo Trump. Aún no sabemos si fue una decisión que se precisó en el guion, o fue algo involuntario mientras se filmaba. Pero al mismo tiempo, lo que eleva al personaje más allá de ser el protagonista, es Stan. Su rostro con esas muecas que nos dan risa, los movimientos de su cuerpo, el tono de voz. E insistimos, no es una caricatura, sino una representación de la figura.
Luego, Bakalova también lo hace excepcional para interpretar una mujer con aspiraciones grandes en cuanto a su individualidad. Una mujer que buscaba emprender su propio negocio y jamás someterse a un hombre. El desarrollo en la relación de Ivana con Donald, también lo carga, de alguna manera, la actriz búlgara (a quien recordamos por su participación en Borat de 2020 y Bodies Bodies Bodies de 2022).
Jeremy Strong da vida al abogado Cohn, un hombre lleno de contradicciones tan tremendamente visibles, que no es imposible concebirlo fuera de esta producción. Cohn era gay, pero sólo sus clientes y amigos más cercanos lo sabían… cosa curiosa cuando recordamos que fue uno de los abogados que más persiguió a la comunidad durante una época.
Strong nos presenta a Cohn como un hombre que navega entre la vulgaridad y la elegancia, el crimen y la ley, y lo hace con una mirada impávida, pero al mismo tiempo mostrando cierta dulzura hacia su aprendiz, el joven y maleable Donnie Trump. Y sí… denle todos los premios.
Mejor Edición
El ritmo de The Apprentice es elevado, y no se detiene en ningún momento. Con esto no queremos decir que todo el tiempo sucedan cosas, pero se basa mucho en las conversaciones y las respuestas físicas y emocionales de esas conversaciones, por lo que nos da la sensación de que todo el tiempo nos están diciendo algo.
Además, la cinta está dividida en dos partes. La primera en la década de los 70, los inicios de Trump como un empresario que se suman a la llegada de Roy Cohn a su vida; y la segunda, que nos lleva unos años después a la inmersión total de la corrupción, incluso sin la presencia de Cohn.
Mejor Guion original
Gabriel Sherman es el encargado del guion de The Apprentice. Desde que la película se estrenó en Cannes, ha dividido opiniones entre la crítica. Para algunos es genial mientras para otros se trata de una película un tanto tibia que no se involucra con el personaje principal. Por ahí dijeron que se “hace más tonta” conforme avanza.
No coincidimos con esa idea. Para nosotros, la maravilla de The Apprentice además de estar en la interpretación de Strong, está en el guion. Y si la película se siente un poco tonta, es porque se centra en un personaje lleno de absurdos y situaciones que nos parecen ridículas. Es decir que parece ser intencional. Por lo que la línea del tiempo y el ritmo, sumado a una narrativa que mezcla géneros, dan como resultado una grandiosa película como esta.
