“El problema era él que quería matar a Marcela”, dijo Andrés García en una entrevista para el programa Un nuevo día de Telemundo haciendo referencia a la desaparición de la mamá de Luis Miguel y el hecho de que Luis Rey estuvo involucrado. De acuerdo con el actor, Luis Rey le pidió ayuda para matar a Marcela no sin antes haber acudido con el Negro Durazo, jefe del departamento de policías en la Ciudad de México en aquella época.
Andrés García dijo que se negó a ayudarlo, pero sus declaraciones confirman, en caso de ser ciertas, muchas teorías alrededor del paradero de Marcela y la responsabilidad de Luisito Rey en el asunto. A pesar de todo el interés que pueda surgir a partir del tema, la realidad es mucho más delicada y, también, más mediática.
Primero, Andrés García es un actor de cine y teatro con más de 40 años de carrera. Sin embargo, por problemas de salud asociados a su edad, García dejó de estar frente a las cámaras hasta dejar de ser un tema de conversación… hasta ahora. Por otra parte, se encuentra la salida de la segunda temporada de Luis Miguel, la serie en 2019.
La primera entrega de esta producción, como muchos señalaron, se convirtió en un fenómeno de la televisión y redes sociales, no es de extrañarse que las expectativas alrededor de esta nueva entrega sean iguales. Sin embargo, nada quita que se trate, nuevamente, de un tema sumamente delicado.
Entonces, ¿por qué no es de tomarse a la ligera estas declaraciones pero tampoco hacer mucha bulla por ellas?
The Truman Show, película de 1998 protagonizada por Jim Carrey, sigue la historia de un niño que al ser abandonado afuera de unos estudios de televisión, se convierte en el centro de un reality show que, literal, presenta a millones de personas su vida en cada una de sus etapas por más íntimas que estas sean. Desde que era un bebé, su vida es filmada en un set de grabación que simula un pequeño pueblo con miles de cámaras ocultas para que este no descubra que, en realidad, es el protagonista de un programa.
La idea es aterradora; sin embargo, actualmente estos formatos de entretenimiento son cada vez más populares (por no decir preparados) a partir de las necesidad de las audiencias de ver cómo es la vida de alguien ajeno, y más si ese alguien es famoso y tiene una vida de ensueño como la familia Kardashian.
Ahora bien. Quizá no es (tan) necesario salir en la televisión en un horario programado y en un mismo canal, para comprender este fenómeno pues, en realidad, esta necesidad de saber los detalles más íntimos de una persona viene desde mucho antes de The Real World de MTV y sus derivados. Y el mejor ejemplo es Luis Miguel y el interés en su vida desde que era un niño.
La primera aparición de Luis Miguel en la televisión fue en 1981 a los 11 años en el canal 44 de Ciudad Juárez. Ahí interpretó “La Malagueña” junto a su padre en la guitarra. Y con esto, comenzó la fascinación por cada aspecto de la vida del cantante.
Desde esa edad, los medios siguieron los detalles más íntimos de su vida como la fuerte presencia de su padre y el rol que jugaba su mamá… y con esta última, lo que a la fecha sigue siendo tema de conversación: la desaparición de Marcela Basteri en 1986.
Ese año, Luis Miguel, sus hermanos y la familia del cantante, dejaron de saber sobre el paradero de Marcela, la cual desapareció bajo circunstancias extrañas y poco comprensibles. Desde hace más de 30 años, se han creado en los medios un sinfín de teorías sobre las razones de su desaparición y la posibilidad de que se encuentre sin vida.
Con el estreno de Luis Miguel, la serie de Netflix a principios de 2018, el tema se convirtió en tendencia y trajo como resultado no el esclarecimiento del paradero de Marcela, sino el resurgimiento de la carrera de Luis Miguel, la cual estaba en decadencia a partir de las deudas del cantante y sus desplantes con el público.
A pesar de ser un tema mediático y, es justo decirlo, morboso, se trata también de un tema vulnerable en relación con la vida de una persona y los efectos que su desaparición o muerte tuvieron en su familia. Por eso, no es de tomarse a la ligera las declaraciones del actor Andrés García sobre el tema de Marcela y también, no es necesario hacer tanto ruido…
