Para muchos fans de Harry Potter en todo el mundo, Daniel Radcliffe siempre será la viva imagen del icónico hechicero. Incluso él ha aprendido a vivir con este hecho. Por otro lado, algo que todavía no está entre sus planes es ver Harry Potter and the Cursed Child, la obra teatral que cuenta lo que sucedió después de que su personaje derrotara a Voldemort.
Ahora, uno podría asumir que, después de tantos años, el actor simplemente terminó odiando el hecho de que todo mundo lo conozca por este rol y que por eso se rehúse a ver la obra. Sin embargo, la razón por la cuál Radcliffe no quiere hacerlo es totalmente diferente y, de cierta forma, hasta justificada.
Según lo que el muchacho dijo durante una entrevista con Late Night With Seth Myers, todo gira en torno a los fans de Potter que acudan a la obra. Si estos notaran la presencia de Radcliffe en el recinto, es probable que no prestaran atención a la función por tratar de mirar o documentar sus reacciones.
“Probablemente no la veré”, dijo Radcliffe. “No tengo planes para hacerlo. Y no porque creo que me provocaría una crisis existencial en la cual me diga ‘Oh, ¡eso es lo que paso!’, porque siento que las personas me mirarían para ver mi reacción. Es posible que sea [una percepción] completamente presumida y arrogante por mi parte y que a las personas no les importaría. Pero sí creo que si estuviera rodeado de los fans de Harry Potter [mientras veía la obra] podría ser un poco peculiar”.
Es posible que muchas personas opinen que ese no es un buen motivo para perderse la obra, pero tampoco se puede negar el hecho de que existe gente que prefiere unos segundos de fama al grabar celebridades que disfrutar de un buen espectáculo. Tal vez es por eso que Seth Myers le dio la razón a Daniel después de dejar clara su postura.
Por último, siempre existe la posibilidad de que el actor acuda a la obra disfrazado, aunque tendría que caracterizar a un personaje que fuera diferente a Potter. Uno nunca sabe, tal vez podría ir como Draco Malfoy y nadie se daría cuenta. Hay muchas opciones y las posibilidades son infinitas.