Los humanos ya llegaron a la Luna y tienen la capacidad de enviar objetos fabricados por él mismo a lugares que nunca habíamos imaginado. La tecnología e investigación, asimismo, nos ha dado la oportunidad de anticiparnos a eventos que cambian la perspectiva total de las cosas, incluida nuestra existencia. Sin embargo, hay una pregunta constante que todavía no logramos definir: ¿seremos capaces de vivir fuera de la Tierra?, ¿el universo tiene un lugar reservado para nosotros en el futuro?
La respuesta, aunque no sea definitiva y falte mucho tiempo para afirmarla en su totalidad, es sí. Y la prueba se encuentra en la última misión a la Luna auspiciada por el gobierno de China. Resulta que a principios de enero de 2019, como parte de la misión Chang’e-4, una sonda aterrizó en la parte más alejada de la Luna con una pequeña semilla germinando. La Universidad de Chongqing, responsable del diseño de esta parte de la misión, creó una biosfera lunar de 18 centímetros con aire, agua y tierra, todo con las condiciones adecuadas para que una planta se pueda sembrar, brotar y crecer.
De acuerdo con la National Space Administration de China, esta es la primera vez que se realiza esta clase de experimentos. Según The Guardian, el líder de esta misión biológica, Xie Gengxin dijo que “esta es la primera vez que los humanos hacen experimentos de crecimiento biológico en la superficie lunar”. Plantas y derivados han crecido dentro de la estación espacial internacional, pero esta es la primera vez que echa brotes en la Luna. de acuerdo con este mismo medio, el resultado de este experimento es crucial para el desarrollo de otras misiones a futuro, pues ofrece la oportunidad de producir alimentos en el espacio sin la necesidad de regresar a la Tierra por provisiones. En otras palabras, los astronautas podrían pasar más tiempo en sus respectivas misiones.
Ahora bien. ¿Qué crecerá en esta pequeña biosfera lunar? Dentro hay semillas de algodón, arabidopsis, planta de papa y más. De todo lo que se sembró, sólo la semilla de algodón ha germinado, las demás todavía no brotan.
De forma histórica, el Chang’e-4 aterrizó en la parte más alejada de la Luna para realizar exploraciones relacionadas a la atmósfera lunar, radiación cósmica y la interacción entre el viento solar y la superficie de la Luna. Esta misión representa un esfuerzo mayúsculo de China para convertirse en un potencia mundial en cuanto a la investigación espacial y la presencia del hombre fuera de la Tierra, y con su experimento biológico, parece que va un paso más adelante…
