El 2018 está a punto de acabar, y qué mejor manera de hacer un propio recuento del año a través de las grabaciones hechas al asistente virual, Alexa. Lo mismo pensó un jóven alemán, así que solicitó su historial de grabaciones a Amazon, pero en respuesta sólo obtuvo, mil 700 grabaciones de una pareja extraña, en la que se incluían dirección, nombres completos y gustos musicales de la misma. What?!
En las grabaciones se podían escuchar las conversaciones típicas de casados, las peleas y el clásico “¡no hay papel!”. El usuario que pidió su historial, afirmó a la revista alemana “C’t de Heise”, que las grabaciones se escuchaban desde diferentes partes de la casa de los extraños, incluso en la regadera; al menos así lo afirma Reuters.
Con todos los datos recabados en los audios, la revista pudo identificar a la pareja agraviada hasta el punto de contactarlos en su domicilio y llevó las grabaciones hasta Amazon. En un principio, Amazon no dio respuesta sobre como cualquier usuario podía tener acceso a las grabaciones de terceros vía Alexa, pero fue hasta que la publicación presionó cuando el mundo supo la verdad.
“Este desafortunado caso fue el resultado de un error humano y fue un único caso“, ha asegurado este jueves un representante de Amazon Alemania.
La compañía especializada en el comercio electrónico, aseguró que los archivos de Alexa enviados equivocadamente fueron borrados inmediatamente después de conocer el incidente. Aunque por su puesto, el destinatario primario, aún conserva su copia. Amazon dijo que ya se tomaron medidas para mejorar los procesos y evitar esto a futuro. “También estamos en contacto, como medida de precaución, con las autoridades regulatorias correspondientes“, explicaron a Business Insider.
Aunque seguramente en el transcurso, algo salió mal, pues algunos de los usuarios a nivel mundial, se quejaron en internet de que sus bocinas inteligentes dejaron de funcionar, cuando más se les necesitaba, la noche de Navidad del 2018.