Casi se han cumplido 90 años desde que se comenzaron a celebrar los Premios Oscar en este mundo. Durante todo ese tiempo, se han entregado miles de estatuillas de las cuales, algunas ya ni siquiera están con sus dueños legítimos. En otras ocasiones pasan a ser pertenencia de las familias de los actores y unas pocas hasta se extravían, como la que compró Michael Jackson por ahí de 1999.
Lo cierto es que cada una tiene un gran relato que contarnos. Hoy queremos hablar de aquellas que ni siquiera llegaron a las manos de quienes merecieron el honor de tenerlas por un factor impredecible: la muerte. A diferencia de un premio o reconocimiento, uno nunca sabe cuándo le va a tocar y eso convierte a la historia de cualquier celebridad, en una que de alguna manera, quedó inconclusa.
Vamos a usar un breve instante de su tiempo para recordar a quienes nos dejaron con su legado fílmico como el más grande reconocimiento en vida, así como lo que ocurrió con sus galardones.
Peter Finch
Frederick George Peter Finch, actor británico de ascendencia australiana, fue nominado al Premio de la Academia como Mejor Actor gracias a su participación en el filme Network, que fue lanzado en 1976. Sin embargo, jamás pudo recoger la estatuilla cuando resultó ganador debido a que dejó este mundo el 14 de enero de 1977.
Como un dato curioso, el actor fue el primero en convertirse en un ganador del Oscar post mortem, por lo que fue su viuda, la señora Eletha Finch, quien terminó recibiendo el premio en su lugar.
En ese mismo año, otras celebridades como James Dean, Spencer Tracy y Massimo Troisi, habían sido nominadas al Oscar como Mejor Actor después de haber fallecido, pero al final el honor fue otorgado a Finch. Este también se llevó un Premio BAFTA y un Globo de Oro (también como Mejor Actor) gracias a Network.
Heath Ledger
Este muchacho es más de nuestra época pero de igual manera se ha convertido en uno de los dos únicos actores que han sido merecedores al Oscar después de morir. Como saben, su rol como The Joker en The Dark Knight fue totalmente soberbio, por lo que era obvio que se llevara el premio como Mejor Actor de Reparto, que formaría parte de las pertenencias de su padre Kim Ledger por cierto tiempo.
El trabajo del actor no sólo fue recibido de manera positiva por la opinión profesional, ya que los fans de la franquicia y hasta de los cómics también elogiaron a su versión del Joker. Incluso el crítico de cine David Denby, un hombre que no había hablado bien del filme dentro de su opinión en The New Yorker, se tomó su tiempo para evaluar positivamente la actuación de Ledger, describiéndola como “siniestra y espantosa”.
“Su interpretación es un acto final heroico e inquietante: este joven actor contempló el abismo”, dijo Denby dentro de su crítica.
Ahora han pasado 9 largos años desde que el actor y director falleció debido a una intoxicación por drogas a los 28 años. En 2016, el ya mencionado padre de la celebridad dijo que su estatuilla pasaría a ser propiedad del Western Australian Museum, donde formaría parte de una exhibición junto a un traje de Batman en The Dark Knight, así como algunas cartas, diarios y guiones.
Pensamos que es un poco triste honrar la memoria de estas grandes figuras del cine, sólo hablando de su muerte. ¿Por qué no mejor recordarlos por el increíble trabajo que hicieron a lo largo de sus carreras? Podemos apostar que cada uno de ustedes tiene sus películas favoritas, así que no estaría mal verlas.
