La situación en Estados Unidos en cuestiones políticas y sociales es muy delicada. Los últimos acontecimientos en Charlottesville y las declaraciones incendiarias de Donald Trump no tienen muy cómodos a los jugadores de la NFL.
Colin Kaepernick comenzó esto el año pasado. El mariscal de campo inició hincándose durante el himno de los Estados Unidos en la pretemporada y de ahí más de uno se le sumó. Esto parece que le costó la carrera a Kaepernick. Se convirtió en agente libre y a pesar de que algunas franquicias necesitan a alguien en su posición, no lo han contratado.
Probablemente los dueños de los equipo pensaron que ahí quedaría el asunto, pero no fue así. Los actos de racismo en la unión americana continúan y los atletas no piensan quedarse callados.
La última protesta fue del safety Malcolm Jenkins. El jugador de los Philadelphia Eagles hizo el Black Power salute, que se hizo famoso en los Juegos Olímpicos de 1968 con Tommie Smith y John Carlos.
Chris Long and Malcolm Jenkins picture is iconic. Shows what true patriotism looks like pic.twitter.com/sirRaSGqaE
— Exavier Pope (@exavierpope) 18 de agosto de 2017
Además, se destaca de gran manera el apoyo de Chris Long. El ala defensiva es uno de los que más tiene actividades altruistas y de los primeros jugadores de raza blanca en apoyar este tipo de protestas. Solo necesitó abrazar a Jenkins para marcar su posición.
Otro que se sumó fue el que acaba de regresar del retiro, Marshawn Lynch. El corredor de los aún Oakland Raiders lo hizo en el primer juego de pretemporada y además, decidió que no tenía que darle explicaciones a la prensa de por qué lo hizo.
Beast Mode es uno de los personajes más enigmáticos de la NFL. Su postura con los medios de comunicación es distante y casi nunca está en el ojo del huracán. Sin embargo, ahora cree que la situación lo amerita.
#Raiders RB Marshawn Lynch, who spoke with local reporters today, remains a national treasure. I mean… 👇🏽 pic.twitter.com/19v59QkbEQ
— Ian Rapoport (@RapSheet) 17 de agosto de 2017
Finalmente, Michael Bennett también se sumó a este disgusto. Durante el himno de su país se quedó sentando en la banca mientras sus compañeros ponían mano en pecho y cantaban.
Solo queda ver si la liga toma medidas, que no debería, pero con Roger Goodell no se sabe…