Problemas mecánicos, humedad, calor, neumáticos muy delicados y 56 vueltas para dormirse, fueron los predominantes en un carrera que de todas todas ganó Lewis Hamilton, para darle la segunda victoria de la temporada a Mercedes.
El único que pudo medianamente seguir el paso de la saeta plateada fue Sebastian Vettel, quien poco a poco arriba de su RB10 muestra mejorías, por lo cual ocupó la segunda plaza de la carrera, seguido de Nico Rosberg, quien completó el podio y acabó por darle más puntos a su escudería, quien hoy es la reina en el Campeonato de Constructores.
Parecía que todo sería miel sobre hojuelas para Checo, ya que recordamos que en Malasia normalmente había tenido suerte al correr, pero el cielo comenzó a tornarse gris, y no precisamente por la lluvia, sino porque el tapatío tendría complicaciones que no estaban dentro de sus previsiones.
Faltaban algunos minutos para que se diera por iniciado el GP malayo y los problemas comenzaron para Sergio Pérez. En las vueltas previas sintió que el VJM07 no tenía potencia, entró a pits y se confirmó su predicción, Sepang no sería una buena carrera; ni siquiera la inició.
Después del abandono del tapatío, Pastor Maldonado dijo adiós a la carrera por un choque que obligó a su equipo a retirar al venezolano. Posteriormente los franceses, Jean Eric Vergne y Jules Bianchi hicieron lo propio, debido a problemas en sus monoplazas. Así mismo, en la vuelta 37, Esteban Gutiérrez no pudo continuar.
Este GP no tuvo espectacularidad, parece que las escuderías se cuidan demasiado, no arriesgan. Los motores ya no rugen como antes, las reglas son muchas y muy complejas, nadie quiere sobrepasarse y caer en las garras de los castigos. Tal y como sucedió en Australia, los monoplazas siguen con problemas y no se ve para cuando se puedan solucionar.
Daniil Kvyat parece ser uno de esos que quiere ponerle sabor al caldo, no tiene nada que perder y realiza maniobras que ciertamente nos hacen levantarnos de nuestro asiento. Force India, Williams y McLaren nos han quedado a deber. Ferrari poco a poco escala puestos y parece que Fernando Alonso estará en la pugna.
Después de todos los problemas que siguen teniendo los autos en la presente temporada, los equipos harán un viaje a Bahrein, donde seguramente poco cambiará, ya que solamente nos separa una semana de Malasia al tercer GP del 2014 y el segundo en suelo asiático.