Muchos usuarios alrededor del mundo se han quejado amargamente porque Instagram no permite contenido sexualmente explícito. ¿Por qué una empresa debería limitar lo que compartimos en línea? Para suplir esa necesidad apareció Pornostagram, una red social prácticamente igual, pero con la diferencia de que permite cualquier tipo de contenido sexual.
Pornostagram nace de la necesidad de generar contenidos “adultos” en las redes sociales. Ciertamente que en Instagram no todas las imágenes son un dechado de refinación y buen gusto, por lo que no se entiende que censuren cierto tipo de contenido. Muchos expertos en el tema sugieren que el futuro de la pornografía en internet está en las redes social y la posibilidad de compartir contenido de manera horizontal (en los dos sentidos).
Es por eso que la desarrolladora web francesa Lechemia lanzó Pornostagram hace algunos meses para Android. Quentin Lechemia, creativo detrás del desarrollo comentó:
“Con mis novias acostumbro a enviar y recibir fotos y mensajes sexys y me di cuenta que de una manera u otra, no importa tu edad o género, siempre estamos un poco avergonzados por hacer eso. Y pensé que tal vez permitir que la gente suba fotos a una aplicación y que puedan aplicarles filtros podía ayudar a superar la pena”
La verdad es que esta aplicación no es la primera que aprovecha las plataformas de redes sociales para permitir que sus usuarios intercambien fotos sexuales (ahí está Fuckbook y Pinsex), pero la idea de usar los filtros de Instagram realmente parece una idea ganadora. Al momento tiene unos 10,000 afiliados y cuenta con 53,600 visitas únicas al mes. No parece mucho, pero al app está creciendo, además hay que considerar que no es gratuita (cuesta 3.9 dólares al mes).
Cindy Gallop, dueña de la página Make Love Not Porn, se encuentra especialmente entusiasmada con la idea. Según ella:
“Aplaudo a Pornostagram por lo que intentan hacer, pero creo que es una gran vergüenza que tuviera que existir un Pornostagram en primer lugar. Lo que ellos hacen debería ser aceptado en Instagram, porque es un enorme halago que cualquier comunidad de redes sociales se sienta lo suficientemente cómoda como para explorar su propia identidad sexual”
Las palabras de Gallop no pueden ser más elocuentes. Aunque debemos admitir que proyectos como Pornostagram fallan en garantizar una comunidad diversa, como la que existe en cualquier red social de respeto. La mayoría de las imágenes presentan mujeres jóvenes, blancas y delgadas. No hay mucho espacio para los gustos reales, sino sólo para aquellos que parecen venidos del porno más convencional.
