El Museo Van Gogh de Amsterdam se enorgullece de presentar un «nuevo» cuadro del afamado genio del pincel y de la Oreja mocha.
Y es que el cuadro había permanecido durante años en el ático de un coleccionista noruego el cual, tras comprarlo en 1908 (no nos pregunten la edad del señor, no hemo podido calcularla pero parece que fue compañero de la escuela de Chabelo) creyó que era una falsificación.
El cuadro es un paisaje de robles del sur de Francia y fue pintado en 1888.
El investigador que ayudo al proceso de autenticación, Louis van Tilborh, expresó:
«Este descubrimiento es más o menos una experiencia que ocurre sólo una vez en la vida»
La autenticación se logró en un estudio comparado de la técnica del genio holandés y gracias a que él escribió una casta dirigida a su hermano el 4 de julio de 1888 en la que hablaba del cuadro.
****Vía Reforma, Le Monde