Lo que necesitas saber:
Lindavista es otra de las colonias interesantes que tenemos en la CDMX. Inició en la década de 1930 como una zona habitacional y desde entonces no ha pasado de moda.
Al norte de la CDMX tenemos lugares típicos y barrios emblemáticos. Uno de ellos es la famosa colonia Lindavista, que seguramente todos los chilangos conocemos o por lo menos hemos oído hablar de ella. Aquí te contamos la historia de Lindavista, una colonia icónica del norte de la capital mexicana, importante desde sus orígenes como una zona residencial hasta llegar a la actualidad.

Lindavista tiene su propia historia que la hace única, como otros tantos barrios importantes. El lugar se fundó en la década de 1930 en lo que originalmente era un rancho lechero y se planeo como una zona habitacional que miraba hacia el futuro. Aunque no está dentro de la zona céntrica de la ciudad, es importante como un barrio comercial y se puede decir que tiene ha desarrollado su propia cultura.

Considerada como el centro urbano más importante del norte de la CDMX, en un principio se destacó por sus hermosos paisajes rodeados de cerros y su aire puro. Esta es la historia de esta colonia de la alcaldía Gustavo A. Madero.
Los inicios de la colonia Lindavista
Esta colonia comenzó a construirse en los grandes terrenos del Rancho Los Pirineos, propiedad de los hermanos Martín y Miguel Oyamburu Arce, famosos empresarios de la época y fundadores de la Cervecería Modelo. Este lugar donde se producía leche a niveles industriales cambiaría radicalmente para que sus terrenos se fraccionaran con el fin de hacer una nueva colonia residencial.

Acabada la Revolución Mexicana, los hermanos Oyamburu deciden convertir el rancho en un nuevo barrio moderno y residencial para ser habitado por la clase media alta de la capital. El proyecto inició en 1932 y en un principio estuvo a cargo del urbanista norteamericano Teodoro Gildred, quien diseñó el trazo y las primeras casas de la colonia inspirado en la arquitectura de las zonas habitacionales de California.

Lindavista se convirtió en un lugar muy atractivo para vivir. Además de sus casas modernas de estilo californiano con muros blancos, elementos de madera y tejas rojas, en el lugar se fundaron importantes colegios religiosos como el Colegio Tepeyac o el Colegio Guadalupe que hasta hoy conservan su gran prestigio. Hoy esta colonia es donde hay más colegios privados en toda América Latina.
Como bien podemos imaginar, su nombre se le quedó por los hermosos paisajes que ofrecía en un principio. La gente no dejaba de elogiar la linda vista que se tenía hacia cualquier lado que se volteara.
El crecimiento de la colonia
Lindavista también contribuyó con la era del Cine de Oro nacional. En 1946 se inauguraron los Estudios Tepeyac cerca de avenida Insurgentes Norte. Ahí se filmaron alrededor de 150 películas icónicas de la época como Los Olvidados de Luis Buñuel, por esto mismo figuras importantes como María Félix o Pedro Infante llegaron a vivir a esta colonia que llegó a ser conocida como el Beverly Hills mexicano.
Con el paso del tiempo algunos de los grandes terrenos con casas enormes y mansiones también se fraccionaron para construir viviendas más pequeñas para las familias mexicanas de clase media, además, muchos migrantes españoles llegaron a vivir ahí durante la segunda mitad del siglo XX.

Ya para la década de 1970 Lindavista era uno de los lugares más prestigiosos de la ciudad, una colonia moderna con iglesias, todo tipo de comercios, escuelas, hospitales públicos y privados, librerías, grandes salas de cine y otros atractivos que la hicieron un lugar autónomo e independiente.
Sitios de interés
En esta famosa colonia de la alcaldía Gustavo A. Madero tenemos recintos importantes como la iglesia de San Cayetano, diseñada por el arquitecto Francisco Serrano y ubicada en avenida Montevideo, en el punto central de Lindavista. Su construcción inició en 1952 y se inauguró en 1967.

También ahí se fundó el emblemático Cine Lindavista con su torre art déco, ubicado en avenida Montevideo e Insurgentes Norte, inaugurado en 1942 para la diversión de las familias locales y que tiempo después, en los años 70, se convirtió en “casa de Disney”, y se volvió famoso por sus matinés.

El Cine Futurama, inaugurado en 1969, tenía capacidad para 6 mil espectadores y por algún tiempo fue la sala de cine más grande de Latinoamérica. Ya en los años 80 se dividió en cinco salas y lamentablemente con el terremoto de 1985 quedó abandonado. En 2003 inició el proyecto de convertirlo en el Centro Cultural Futurama, que abrió sus puertas en 2009 y en el que hoy tenemos actividades interesantes como conferencias, proyecciones de cine, teatro, talleres y presentaciones de libros.
Date una vuelta por Lindavista
Si no conoces Lindavista aprovecha y date una vuelta. Otros de sus lugares interesantes son el Museo de los Ferrocarrileros, el Centro de Arte Bicentenario Poeta Hugo Gutiérrez Vega, la Iglesia del Pozito, la sede de Zacatenco del Instituto Politécnico Nacional, la Casa del Reloj, hogar del compositor Roberto Cantoral o el Parque Nacional del Tepeyac. Esta colonia tiene el privilegio de estar muy cerca de la Villa de Guadalupe.

Lindavista no deja de llamar la atención. Tiene centros comerciales, cafés, restaurantes y todo lo que hace falta para pasarla bien. Este barrio característico por sus hermosos paisajes de vistas hermosas es otra pieza importante de las que componen la CDMX, así como uno de los barrios emblemáticos que tenemos al norte de la capital mexicana.